El Espanyol de Quique Sánchez Flores no acaba de arrancar. La dolorosa derrota contra el Sevilla en la primera jornada ha sido seguida en la segunda jornada con un triste empate contra un Málaga que se llevó mucho premio del RCDE Stadium.

El entrenador madrileño ha explicado que el Espanyol "necesita entrenar sobre todo la mente" y ha asegurado que se debe "cambiar la mentalidad para hacer ver al equipo que ahora hay unas ambiciones distintas". "Tenemos falta de confianza por lo que ha pasado en los últimos tiempos", ha advertido.

El conjunto periquito ha dominado el partido tanto en el terreno de juego como en el marcador; sin embargo, el Málaga ha sabido jugar sus cartas y ha marcado dos goles consecutivos para empatar el encuentro. Sánchez Flores ha explicado que se ha sentido impotente ante los hechos: "Cuesta cuando nos metemos en el vestuario lamentando situaciones que tenemos que resolver y no lo hacemos".

Los cambios han podido condicionar el encuentro ya que el equipo ha recibido un mensaje claro con la entrada en el partido de Felipe Caicedo y Pape Diop. La idea era retener el balón y aguantar el resultado, pero no ha sido así. El entrenador periquito ha señalado que "en dos o tres momentos en los que no tenía que haber pasado nada, pasaron cosas". 

La defensa del Espanyol ha vuelto a ser cuestionada pese a que ha rendido mucho mejor que contra el Sevilla. Aun así, Sánchez Flores no acaba de estar de todo contento con las actuaciones de la zaga blanquiazul, de la que ha señalado que "todos en el club saben que es momento de refrescar la competencia en la línea". Se espera que en los últimos días se firmen un central y un lateral izquierdo.

Por último, la Liga no ha hecho nada más que comenzar por lo que Sánchez Flores ha asegurado que está "para ayudar a los futbolistas" porque "cuando un equipo tiene debilidades se flagela y llega al vestuario preguntándose los motivos".