El Espanyol ha conseguido lo que parecía imposible. El conjunto periquito ha logrado el empate en el último suspiro del añadido y con un hombre menos tras la expulsión de Felipe Caicedo. Quique Sánchez Flores se ha congratulado por el punto que han conseguido sus pupilos cuando todo estaba en contra: “Confiaba y esperaba algo así, pensaba que en los minutos finales podía llegar una situación positiva”.

El técnico madrileño ha asegurado que el Espanyol estaba “haciendo los mejores 20 minutos de la temporada” cuando el escenario, que parecía preparado para un victoria local, se “ha complicado”. Sánchez Flores ha explicado que el conjunto catalán estaba “jugando muy bien, profundo y rematando y metiendo al rival en su campo” cuando ha llegado “el gol del Eibar y los desajustes defensivos”. “Después el gol en propia puerta y todo ha sido muy negativo e incómodo”, ha reconocido.

Sánchez Flores ha indicado que el Espanyol “está preparado para competir” y ha valorado que “a falta de ganar todo lo que no sea perder es positivo”. El preparador madrileño, además, ha reconocido que ha visto “peligrar el partido” y que el resultado deja a los espanyolistas “en esta situación de despegue que no se acaba de producir”.

El partido contra el Eibar era un partido clave para los intereses espanyolista. Pese a que el resultado no ha sido el deseado los catalanes han empatado haciendo tres goles en la segunda parte. Sánchez Flores ha comentado que este empate “puede ser bueno” por cómo se ha producido y que es necesario “un punto de inflexión”. “Es necesario creer, imaginar lo que uno quiere y positivizar pensamientos”, ha finalizado.