El debut en Primera División del Girona está teniendo subidas y bajadas, aunque ya era lo esperado para un recién entrado en la categoría de oro. Los catalanes están siendo irregulares en este primer tramo de temporada, y tras unas semanas de alegría total, donde se llegó a soñar con Europa, han llegado las malas noticias de golpe.

Los de Machín estuvieron todo el noviembre sin conocer la derrota, con un balance de dos victorias y dos empates en competición liguera (uno de ellos en la última jugada del partido). Eso sí, pese a empatar en la vuelta del partido de Copa del Rey ante el Levante, los de Pablo Machín no consiguieron superar su primera eliminatoria en el torneo del 'KO' como equipo de Primera División.

Pero el diciembre no ha traído buenas noticias al Girona. Montilivi se preparaba para recibir al colista, el Alavés, y si los gerundenses conseguían los tres puntos se colocaban a tan solo un punto de puestos que dan acceso a jugar la Europa League. Y en tres minutos, ese sueño se ponía a tiro. En los minutos 59 y 62, Stuani y Juanpe anotaban un tanto cada uno y el dos a cero prevalía en el electrónico. Pero llegó Ibai Gómez para derrumbar la alegría de Montilivi. En poco más de veinte minutos, él anotó tres goles para dar la vuelta al marcador, el último de estes en la última jugada del partido.

Por si fuera poco, en este partido Pablo Machín perdió a dos de sus tres centrales titulares. Muniesa y Bernardo están lesionados y no podrán jugar ante el Espanyol el próximo lunes. Además, tampoco se puede contar con Alcalá, quien ya lleva dos meses apartados de los terrenos de juego por unas molestias en el tobillo.

Así pues, el Espanyol deberá aprovechar esa flaqueza que tiene el Girona para intentar sumar los tres puntos y superarlos en la clasificación.

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