Que al Barça le importaba poco la Supercopa de Cataluña lo dejó claro Luis Enrique desde el momento en que dio a conocer la lista de convocados, donde predominaban los jugadores del filial. También estuvieron jugadores del primer equipo con necesidad de minutos o que salían de una lesión como el caso de Arda Turan. Pero pese a ser un título menor, se perdió. Un solitario gol de Felipe Caicedo le valió al Espanyol para llevarse el primer derbi de la temporada, por otro lado, con poco morbo y sin la emoción ni importancia de los que se viven en Liga.

Luis Enrique, pese a la derrota, se mostró satisfecho con lo que vio sobre el campo en sus jugadores: "Ha sido un buen partido y he visto un buen rendimiento de todos los jugadores", decía. No será precisamente por haber jugado sólo con jugadores del filial ya que el Barça salió con seis integrantes del primer equipo en el once inicial. No consiguieron aportar ese plus y no evitaron la derrota, Luis Enrique no vio un resultado justo:"El resultado no refleja lo que ha sido el partido", comentaba el asturiano.

Por si fuera poco, y ya no hubieran suficientes jugadores en la infermería azulgrana, ayer cayó Mathieu, quien debió ser sustituido en la segunda parte. Se le harán pruebas que determinarán el alacance de su lesión, pero el técnico blaugrana lamentó su pérdida: "Es el dato negativo, nos perjudica muy negativamente", lamentaba. Y no es para menos. A Jordi Alba, Piqué, Iniesta y Rafinha se le añade ahora el lateral francés.

Fue un partido para que los jugadores del filial pudieran disputar minutos con el primer equipo, así lo afirmaba Luis Enrique: "Es una buena prueba para ellos, ha servido para ver los que han dispuesto de menos minutos", señalaba el entrenador azulgrana. 

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Sobre el autor
Arnau Montserrat
Periodismo en la UAB, segundo año