El buen fútbol base llegó a la ciudad deportiva Joan Gamper también entre semana. La selección catalana Sub-18 visitó las instalaciones del conjunto azulgrana para disputar un encuentro amistoso ante una mezcla de los dos juveniles culés. En principio, el rival era el Juvenil A de Gabri, pero el técnico prefirió dar descanso a los que fueron titulares ante el Espanyol el pasado fin de semana, y tuvo que tirar de gente del B para completar la lista.
Cuatro azulgranas con la catalana
Hasta cuatro jugadores de los juveniles azulgranas vistieron ayer la camiseta de Cataluña. Ramón Rodriguez 'Monchu', Sergio Gómez, Abel Ruiz y Juan Miranda fueron los seleccionados por el técnico de la catalana para disputar el partido de entrenamiento. Un choque que sirve para preparar la fase previa del campeonato de España donde Cataluña se verá las caras con Valencia y la Región de Murcia en territorio catalán. De los azulgranas, el más destacado fue Monchu, un jugador que no está contando con todos los minutos que desearía en el juvenil A azulgrana, y que ayer se soltó y buscó ser protagonista ante sus compañeros de equipo.
En la escuadra sub-18 destacaron un par de nombres más en cada mitad de partido, que no forman parte de la plantilla azulgrana. Raúl Baena, lateral derecho de la UE Cornellà, y Pol Lozano, mediocentro del Espanyol, fueron los mejores de Cataluña en la primera mitad. Baena fue un auténtico puñal por su banda y mostró su buen hacer en tareas defensivas y su facilidad para sumarse al ataque. A pesar de su pequeña estatura, no es fácil superar al lateral del Cornellà. Rápido y peleón, Baena es un nombre a tener en cuenta de cara al futuro.
Pol Lozano lideró y capitaneó a la sub-18. El centrocampista del Espanyol fue el hombre por el que pasaban todos los balones del combinado catalán. Repartió juego, ordenó y robó balones. Todo un líder dentro del campo. En la segunda parte sobresalieron dos nombres más por encima del resto. Marc Baró, lateral zurdo cedido por el Barça a la Damm, e Iván Gil, centrocampista del Espanyol. Baró fue un lateral muy serio defensivamente y sin miedo a incorporarse al ataque cuando podía. La mayor parte de los ataques se cuajaban en esa banda izquierda. Fuerte físicamente y con dotes técnicas, Baró tiene números de regresar a la disciplina culé al término de la temporada.
Iván Gil mostró su personalidad en el centro del campo catalán. El ex jugador del Marianao Poblet es una joya de la cantera perica. Ayer demostró la calidad que atesora en sus botas sacando el esférico de los centrales bien ayudado por Lozano, compañero suyo en el juvenil blanquiazul. Buen dominio del balón, conducción del esférico notable, fantástica visión de juego e intensidad, son unas pocas de las muchas características que tiene Gil. La cantera perica sigue sacando diamantes en bruto.
Reivindicación de los arietes culés
Los autores de los tantos en el partido fueron los delanteros de los juveniles azulgranas, Jéremy Guillemenot y Juan Miranda. El suizo anotó el 1-0 tras un disparo desde la frontal del área. El segundo gol llegó ya en el segundo acto gracias a la conversión de una pena máxima. Miranda convirtió el penalti para subir el 2-0 al electrónico. Dos delanteros con ganas de reivindicarse y asentarse en la titularidad del juvenil A y B, respectivamente.
Lederman y Patrice de vuelta
Otro aspecto positivo para la disciplina azulgrana fue el retorno al césped en partidos de Ben Lederman y Patrice Sousia. Dos de los jugadores afectados por la sanción FIFA volvieron a disfrutar de nuevo del deporte por el que dejaron sus países para triunfar en Barcelona. Ambos cuajaron un encuentro notable dentro de sus posibilidades. Se notó la falta de ritmo competitivo, pero no faltaron las ganas de demostrar que pueden tener un sitio en las plantillas de ambos juveniles. La sonrisa ha vuelto a dos chavales que llevaban dos años sin poder jugar al balompié. Lederman y Patrice vuelven a sentirse futbolistas.
