Cuando no se pasa por el momento más óptimo es frecuente echar la vista atrás y pensar que los tiempos pasados son mejores. Esa visión tan pesimista no debe corresponderse con la actitud que los blaugranas presenten ante el Leganés. Motivos para creer en ellos mismos hay de sobra, pero si se empeñan en vislumbrar tiempos anteriores pueden encontrar inspiración en la temporada 2009/10, donde fueron un azote contra los conjuntos recién ascendidos.

Real Zaragoza, Club Deportivo Tenerife y el Xerez Club Deportivo fueron los debutantes en la categoría en aquella temporada. Solo el equipo maño fue capaz de evitar –por un estrecho margen– el descenso, pero los tres sucumbieron en todas las ocasiones ante la tiranía del Fútbol Club Barcelona entrenado –por aquel entonces– por Pep Guardiola.

Las actuaciones más reseñables las encontramos, por ejemplo, en el 6-1 que le endosó el Barça al Zaragoza o la manita de los hombres de Pep en su visita a Tenerife (0-5). En el primero de los casos es destacable el doblete del, por aquel entonces, ariete azulgrana Ibrahimovic –uno de ellos de bella factura tras transformar una falta– y el triplete conseguido por uno de los jugadores más apreciados por el técnico de Santpedor, el maliense Seydou Keita.

Por otro lado, el encuentro en el Heliodoro Rodríguez López, se saldó con una brillante actuación del Fútbol Club Barcelona, que dominó de principio a fin con un titánico Lionel Messi  –tres goles en ese partido– y que contó con la desgraciada fortuna de un gol en propia puerta de Ezequiel Luna en los últimos minutos para terminar de redondear el marcador.

Está temporada el Barça ha ofrecido una visión despareja frente a los recién ascendidos. Comenzando por la derrota en casa ante el Alavés (1-2) en la tercera jornada de La Liga Santander, pero imponiéndose en los siguientes encuentros a todos los conjuntos provenientes de la segunda categoría del fútbol español. Frente al Leganés, el Fútbol Club Barcelona debería mirarse en el espejo de la temporada 2009/10 para encontrar la victoria contra el conjunto pepinero.