Gonzalo Higuaín llegó a la Primera División de la Liga Española en el mercado invernal de la temporada 2006/2007, y jugó un total de 190 partidos con la camiseta blanca, dejando 107 goles que ayudaron a conquistar tres Ligas, dos Supercopas de España y una Copa del Rey.

Tras varios años cuestionado y siempre luchando con Karim Benzema por la titularidad, el 'Pipita' se marchó a la Serie A, donde el Nápoles le esperaba con los brazos abiertos tras las salidas de Cavani o Lavezzi, y en el que pronto encajaría bien gracias a la presencia de dos excompañeros en el Madrid: Albiol y Callejón.

En el sur de Italia ha mostrado la que posiblemente haya sido su mejor versión, un jugador maduro e inteligente a quien dar el balón al pie y también a la espalda de la defensa. Capaz de anotar goles con tan solo empujarla, o tras un buen trabajo mano a mano con su defensor.

Higuaín disputó 104 partidos a lo largo de las tres temporadas que estuvo vinculado al equipo napolitano. Allí dejó 61 goles y se llevó el trofeo que le acredita como máximo goleador de la temporada pasada.

Quizá eso fuera lo que terminara de convencer a Massimiliano Allegri, que ha visto en él el delantero estrella que necesita la Juventus de Turín, y donde ya acumula 19 goles en menos de 30 partidos.

Pesadillas blaugranas

Desde que dejara España y se mudara a Italia, el 'Pipita'  no ha vuelto a jugar contra el Barcelona, sin embargo, son 18 partidos los que disputó contra los culés, en una época gloriosa para los barcelonistas, que sólo traen buenos recuerdos y títulos, muchos títulos.

El primer enfrentamiento se produjo en el partido de vuelta de la primera temporada de Higuaín en el Madrid, aquél encuentro acabó 3-3 y se recuerda por la gran actuación de Leo Messi, que consiguió marcar tres goles.

Sin embargo, el siguiente partido el equipo de la capital arrolló al Barcelona y le endosó un doloroso 4-1, donde el argentino consiguió ver portería y anotar así su primer gol en un Clásico.

A partir de ese momento, el Barcelona cambiaría para siempre y es que con la llegada de Pep Guardiola temblaron los cimientos del club, de la Liga y de Europa. El entrenador consiguió un palmarés ya bien conocido por todos, pero también cabría destacar que consiguió enlazar diez encuentros consecutivos sin perder en los que jugase el delantero argentino.

Resalta por encima de todos, el partido que acabó 2-6 y en el que Higuaín consiguió anotar el tanto que abría el marcador y que ponía a los madridistas por delante en los primeros compases.

En los siguientes enfrentamientos, ya con Guardiola fuera de Can Barça, las fuerzas se igualaron e incluso el Madrid consiguió mejores resultados que el Barcelona en sus enfrentamientos directos.

Haciendo un balance general, podemos decir que Higuaín no debe tener buen recuerdo de lo que es enfrentarse contra el equipo blaugrana, y las razones son un total de 18 partidos con solo cuatro victorias y tres goles.