Pocas dudas ha generado la búsqueda del substituto de Luis Enrique al mando del navío azulgrana. El elegido: Ernesto Valverde, recién aterrizado desde Bilbao bajo las filas del Athletic Club. Desde que el técnico asturiano anunciara si no continuidad en el club el 1 de marzo, desde las oficinas nunca ha habido dudas sobre quien debería ser su relevo. “La figura de Valverde fue muy clara. Era un entrenador que ya conocía la casa, que había sido jugador, una persona que ya tenía una gran experiencia, pero sobre todo unos grandes conocimientos. Ha estado en muchos equipos y ha hecho un trabajo muy bueno. En los últimos cuatro años en el Athletic Club ha conseguido siempre entrar en Europa y creo que era el momento de traerlo aquí”, ha manifestado Robert Fernández al rotativo del club.

Preguntado sobre los conocimientos futbolísticos para ser entrenador del FC Barcelona, Robert ha destacado se “ha de reunir una serie de condiciones importantes. Aparte de que futbolísticamente debe ser una persona preparada, también lo debe ser en el día a día con los jugadores, con los medios de comunicación, saber cuál es su posición... Después de todo, el trabajo de un entrenador no sólo es entrenar, conlleva una serie de situaciones que lógicamente debe saber dominar”, por lo que sobre la figura del cacereño no ha dudado en afirmar que “es una persona sencilla, con sentido común, con conocimientos que ha demostrado en otros clubes y otras ligas, y que viene con una fuerza y ​​una vitalidad importantes.”

Ernesto Valverde aterriza a la Ciudad Condal con su segundo entrenador, Jon Aspiazu, y su preparador físico, José Antonio Pozanco, “algo normal y lógico” según el secretario técnico del Barça. “Un entrenador nuevo necesita tiempo, un tiempo que estoy seguro que el público le dará. "Necesita resultados, está claro, pero tendremos que valorar también el trabajo que hay detrás pase lo que pase después, independientemente de los resultados”, ha declarado Robert.

Caras nuevas

En pleno mercado estival, el secretario técnico azulgrana ha querido volver a repetir que  "la plantilla se reforzará con jugadores para las posiciones que necesitamos y serán jugadores importantes”. El Barça, confeccionado con un ‘once’ de garantías en cada escenario que asalta, sabe de la dificultad que comporta el fichaje de jugadores a un equipo repleto de figuras. “La principal dificultad a la hora de fichar es la grandeza de nuestro club, ya que muchos jugadores no vienen porque saben que jugarán poco. Intentamos hacer el trabajo de la mejor manera, pero a veces no acompaña. Pero estamos contentos y satisfechos de los fichajes que hicimos la temporada pasada porque pensamos que este año darán un paso muy importante en sus carreras”, ha reconocido.