Mestalla, el escenario en el que cualquier dinámica puede cambiar, aguardaba con sigilo la llegada del líder de la Liga, que solo había obtenido la ventaja por la mínima en el partido de ida (1-0). Al acecho de la que pudiese ser su primera final en la una década, el Valencia estaba dispuesto a poner toda la carne en el asador en su estadio.
Por su parte, el Barcelona de Valverde, invicto en la Liga y con solo una derrota en su haber desde la llegada del técnico extremeño al banquillo, la que sufrió el cuadro catalán en su visita al Espanyol en cuartos de final de Copa del Rey, no pensaba renunciar a la posibilidad de disputar su quinta final consecutiva.
Los entrenadores emplearon sus mejores tácticas para no solo contener a su oponente, sino también derribarle. Mientras Marcelino sorprendía sustituyendo su habitual 4-4-2 para proponer un 4-3-3, con Rodrigo como su hombre referencia en ataque y los mediocentros acompañando por delante de la defensa, ‘el Txingurri’ apostaba por un 4-4-2 con André Gomes titular.
Presión alta y posesión del Barcelona
Pese a ser un inicio de partido intenso y disputado, los azulgranas no tardaron en hacerse con el control del esférico, ejerciendo presión arriba. La primera ocasión para los de Ernesto Valverde, sin embargo, llegaría a balón parado después de una infracción sobre Leo Messi, que ejecutó el propio argentino, para el despeje de Jaume bajo palos. El arquero desvió el cuero con los puños a la izquierda de la portería.
El conjunto ché dio la réplica con un cabezazo de Rodrigo, que llegando desde segunda línea ganó en el salto a Piqué, para estrellar el cuero en el travesaño y forzar a Jordi Alba a un rescate de urgencias. El de Hospitalet se apresuró a despejar el peligro, enviando el balón fuera del área.
Iniesta, Messi y Busquets movieron los hilos del Barcelona en Mestalla
Era el momento en que empezaba la función de los genios de la creación en el juego barcelonista: Iniesta y Messi. El manchego metió un pase al área para Luis Suárez, pero la pelota se le quedó atrás al charrúa cuando intentaba el control, echando al traste la que pudo ser una buena ocasión para los visitantes. Iniesta dejó también en Mestalla una muestra más de que vive un momento dulce, demostrando sobre el terreno de juego una frescura que hacía tiempo no exhibía.
Todo en juego para la segunda mitad
La posesión por entonces era para los azulgranas, que combinaban bien, con Messi, Iniesta y Busquets como referencia. A pesar de la superioridad de los culés, el conjunto ché buscó las ocasiones para superar la presión y salir en velocidad al contraataque. Rodrigo, el futbolista destacado del Valencia en el primer período, aprovechó para dar un toque de atención a Cillesen con un disparo que despejó el cancerbero holandés.
Una vez cumplida la primera media hora de juego fue Messi quien volvió a avisar con un lanzamiento de falta que se marchó a la izquierda de la portería. A continuación llegó el turno de Luis Suárez, que recibió dentro del área, se perfiló y chutó un balón que fue directo a las manos de Jaume.
Antes del descanso, al que se llegó con el empate sin goles, Kondogbia estuvo cerca de adelantar a su equipo. El francés se quedó con poco ángulo ante André Gomes, y aún así logró preparar un disparo que se estrelló en el exterior de la red. El partido seguía manteniendo toda la emoción en su reanudación, pues un gol de los locales podía poner contra las cuerdas al Barcelona. Ernesto Valverde dio entrada a Coutinho en lugar de un desacertado André Gomes, y esta decisión acabó siendo clave en la resolución del choque.
Estreno goleador de Coutinho
Los de Marcelino mantuvieron la paciencia para conducir el cuero sin precipitarse, con la intención de sacar jugo de las incorporaciones de Rodrigo, el hombre que más inquietó a la zaga culé. Las esperanzas de los valencianistas por remontar la eliminatoria recibieron un auténtico jarro de agua fría tras adelantarse el Barça por mediación de un gol de Coutinho. Luis Suárez se fue en carrera por la banda izquierda para driblar al defensor y poner el cuero en los pies de Coutinho, que no dudó en tirarse al suelo para alcanzar a rematar el cuero, que se coló entre los tres palos, convirtiéndose en su primera diana con la elástica del FC Barcelona.
La reacción por parte del técnico local no se hizo esperar, dando paso a un doble cambio que devolvía al conjunto a su 4-4-2 habitual: Rodrigo se retiró con molestias y cedió su puesto a Carlos Soler, mientras Guedes entraba en sustitución de Coquelin. La entrada de los recambios trajo aire fresco y energías renovadas al Valencia, y Guedes no dudó en probar fortuna con un disparo desde muy lejos, con el que consiguió extraer un córner favorable a los suyos. El intento de remate de Carlos Soler, sin embargo, marchó desviado a la izquierda de la portería defendida por Cillessen.
Rakitic sella el pase a la final
Rakitic dispuso entonces de una doble ocasión: su primer chut lo intentó despejar Garay, pero el croata recuperó el cuero e insistió con un nuevo remate que marchó muy desviado. El central rosarino quedaría malogrado en un lance del juego y tuvo que ser retirado en camilla. En su lugar entró Vezo, en el que era el último cambio para los valencianistas.
Tras un disparo centrado de Coutinho que fue a las manos de Jaume, llegó el paradón de la temporada para Jasper Cillessen. El holandés aguantó la posición para bloquear el remate de Zaza, al que tenía justo enfrente, tras una jugada iniciada por Guedes. Conforme avanzaron los minutos, el Valencia fue decayendo en favor de un Barcelona que buscaba con ahínco sentenciar la eliminatoria.
Tras un remate fuera de Messi, llegó el segundo tanto de los culés, obra de Iván Rakitic. El centrocampista croata fusiló desde lejos para hacer el segundo, sellando así el pase a la quinta final de Copa consecutiva para los azulgranas. Con todo visto para sentencia, Valverde dio entrada a Yerry Mina en lugar del lesionado Gerard Piqué, en el que fue el debut del central, primer futbolista colombiano en la historia del FC Barcelona. Fue una noche perfecta para los azulgranas, que el próximo 21 de abril se medirán al Sevilla en una final con un escenario todavía por determinar.