El Chelsea era, hasta el partido del pasado martes, uno de los pocos equipos a los que Leo Messi se había enfrentado pero a los que no había conseguido marcar ningún gol hasta el momento. Courtois fue el rival a batir y, esta vez, no se le escapó. Le han hecho falta nueve enfrentamientos y 730 minutos contra el Chelsea para conseguir ver portería. Queda ya muy lejos esa primera vez que el argentino pisó por primera vez Stamford Bridge el 22 de febrero de 2006, partido en el que, sin gol, hizo una gran exhibición. 

El Chelsea es el club que más tiempo se le ha resistido al 10 del Barça. El segundo en esta lista es el Villarreal, que consiguió ahuyentar a Messi durante 594 minutos. Por lo que respeta a clubes internacionales, le sigue el Inter de Milán, con 270 minutos; el Rubin Kazan, con 237; y el Liverpool, con 180.

Thibaut Courtois era otro reto a superar. El ex portero del Atlético de Madrid sobrevivió los últimos siete partidos en los que se enfrentó a Messi sin recibir ni un solo gol suyo. El último gol de Messi encajado por Courtois fue el 16 de diciembre de 2012 en el Camp Nou, hace ya más de cinco años, cuando el Barça superó a los colchoneros por un contundente 4-1 y el astro argentino firmó un doblete. 

El gol de Messi, además de significar el primer tanto contra el conjunto de Londres, también valió para sacar un buen resultado de Stamford Bridge, un 1-1 que deja buen sabor de boca a los azulgranas que sudaron a lo largo del partido para intentar no verse superados por los de Conte. Un buen balón robado por Iniesta en el pico del área y con asistencia de él mismo llevaron a Messi a romper esa maldición que le perseguía.