El FC Barcelona B sigue imparable en la Segunda División. Tras conseguir cuatro victorias en los últimos partidos, los de Gerard López salvaron un punto en el Miniestadi contra el Gimnàstic de Tarragona en un partido intenso, propio de un derbi. De esta manera, los azulgrana siguen alejándose de la zona de descenso y ya descansan cinco puntos por encima: "Es un buen punto, más como se ha puesto el partido. La primera parte ha sido floja. Tenemos la sensación de que todo lo que ganamos fuera, no podemos igualarlo en casa. No ha habido ritmo pero ellos tampoco nos apretado en exceso. La segunda mitad se ha animado, hemos tenido opciones y ellos han marcado. Hemos sabido reaccionar bien. El empate es lo más justo. Fuera lo estamos haciendo bien, todo lo que sea dinámica de empate - victoria te puede dar muchos puntos".

"Hemos ido de menos a más. Hemos estado mejor con los cambios, que nos han aportado cosas diferentes. Veníamos condicionados por la lesión de Galarreta, que es una baja clave por la importancia que tiene para mí. Nahuel también ha sido duda durante toda la semana. Después del gol hemos terminado mejor, sin crear ocasiones para merecer los tres puntos. Fuera de casa ellos son un equipo peligroso, probablemente el mejor de la categoría. Al final hoy lo que contaba era puntuar", matizó el catalán.

La 'maldición' del Miniestadi

El filial azulgrana acusó una vez más la presión de jugar en casa. En Barcelona, los de Gerard López son incapaces de desplegar todo su potencial futbolístico. Además, los equipos van a replegarse para dejar pocos espacios y todo perjudica el fútbol del equipo: "Después de la situación hace un mes, estar cinco puntos por arriba del descenso demuestra que ha habido una reacción. En un momento complicado de la temporada, hemos sacado todo para salir de esta situación. No respiro del todo porque queda mucho y todavía no hay nada hecho pero estamos en la pelea por intentar la salvación. Ojalá esta dinámica siga dándose tanto fuera como en casa. No estaremos tranquilos hasta que sea matemático. Las sensaciones son positivas".

"Lo del Mini es futbolístico y un poco mental. Se nos cierran los equipos y nos cuesta más. Con espacios somos mejores. Mentalmente existe la sensación. Había la misma gente de Tarragona que de Barcelona, parecía que jugáramos en su estadio. Los jugadores en casa están más presionados por lo que representa disputar partidos en el Miniestadi y por que la gente quiere ver un equipo consagrado. Se ha de entender que están creciendo y merecen ser apoyados. No es posible que venga más gente, no lo ha sido durante mucho tiempo", puntualizó.

Otro debut más: Riqui Puig

Lejos de la intensidad que supuso el partido, o del resultado hubo alguien que destacó por encima del resto: Riqui Puig. El canterano consiguió debutar con el filial tras haber ido convocado en otra ocasión. "Ha tenido un debut importante para un chico que todavía es Juvenil. Ha entrado muy bien en el partido, porque ha conseguido mover todo, dar frescura al medio campo teniendo así la posesión. Creo que era el momento de hacerle debutar, sin presión. Es un futbolista diferente, que entiende bien el dibujo y la posición. Tiene la personalidad de pedir el balón, jugársela", elogió Gerard.

El equipo ha mejorado con él. Estoy contento por el debut y las sensaciones que ha dejado. Le he dado el voto de confianza porque está haciendo las cosas bien abajo, además también porque vamos necesitados de medios; si Collado, Monchu y demás lo hacen bien van a tener muchas posibilidades de subir. No lo hago de cara a la galería, sino para para ser justo. Si tienen paciencia y trabajo, todos están con las puertas abiertas de poder subir. Sergi Roberto es un ejemplo", finalizó.