Un baile de jugadores. Así se resumiría a priori la campaña de la medular azulona en la temporada 2013/2014. Así como bailaron los esquemas y las ideas desde el banquillo, la columna vertebral del conjunto madrileño vio pasar diferentes piezas sin claros titulares a lo largo de los partidos.

Con una esperanzadora temporada de Mosquera en lo técnico y una soñada continuidad de Borja en el juego oscuro, el mediocampo del Getafe parecía estar definido a comienzo de la Liga. Luis García, pese a los malos resultados, quería y trabajaba la búsqueda de un esquema sólido que permitiese los mejores resultados en una temporada histórica.

No fue de buen agrado comprobar como el equipo se desmenuzaba partido a partido, así como la paciencia de los fieles seguidores azulones.

Con el cambio de entrenador y , en consecuencia, de metodología, un nuevo cambio drástico sufrió la medular del equipo getafense, dando entrada en continuidad a tres hombres que hasta ahora vivían al resguardo de la suplencia: Míchel, Juan Rodríguez y Lacen. Jugadores que, al parecer, demostraron en el trabajo diario ser aptos para entrar en las alineaciones iniciales del técnico rumano, siendo estas una de las primeras bazas de Cosmin para intentar cambiar un destino abocado al descenso.

Foto: Carla Cortés, VAVEL

Si bien el Getafe de Cosmin Contra logró la ansiada permanencia, no son los hombres del mediocampo quienes se llevan los laureles de la victoria. Las improvisadas alineaciones que dejaban a Mosquera y Borja en el banquillo, no lograban crear coherencia en el equipo, pese a que los titulares dejasen leves destellos de esperanza.

Finalmente, con el objetivo conseguido, los dos hombres relegados anunciaron la ya prevista salida del club. Tanto Borja como Mosquera extinguieron contrato con su equipo pensando en nuevas metas que cubrir. Mientras, en el seno azulón, queda la sombra de la duda, al contar con tres centrocampistas (Lacen, Juan Rodríguez y Míchel) que no convencen tras sus ya numerosas temporadas en el equipo. El mercado de verano creará más expectación en esta necesitada línea del campo de Getafe.

Uno por uno

Borja Fernández (29 partidos)

El hombre llamado a ordenar el campo del Getafe, convenció más a comienzo de temporada que a su final. Siendo titular indiscutible con Luis García, demostró ser apto (y con creces) para detener el juego rival y liberar del juego más sucio a su por entonces, compañero en la medular, Pedro Mosquera. Ofreció constantes argumentos para ver en Borja un jugador imprescindible en el juego.

Con el paso de los partidos y la llegada de una mala dinámica en todo el conjunto. Borja, como el resto de sus compañeros, dejó de deslumbrar para únicamente colaborar en mostrar las carencias de un equipo predestinado al fracaso.

El final de temporada fue duro para el futbolista gallego. Contra dejó de confiar en él en los últimos partidos, y se vió relegado a la suplencia. Tras el final de temporada, anunció su salida del club.

Pedro Mosquera (24 partidos)

Demasiadas esperanzas se depositaron en un Pedro Mosquera que no logró convencer sobre el campo. El único hombre con ideas que podía hacer del mediocampo del Getafe, un lugar mejor donde jugar. Avalado por una excelente campaña en el Castilla, Mosquera volvía a Getafe para quedarse, para imponer un juego que quedó impreso en el papel de su contrato.

Muchos fueron los encuentros donde el coruñés no mostró su conocida calidad, la cual sacaba a relucir en cuentagotas. Al igual que con su compañero Borja, fue perdiendo protagonismo en las alineaciones del Getafe. Contra no pudo ver en él al jugador organizador y resolutivo que muchos le exigían ser. Tras dejar el club en este final de temporada, ficha por el Elche.

Medhi Lacen (24 partidos)

Fue el Argelino quien contó con una temporada sobre todo extraña. "Segundón" indiscutible, logró cambiar su suerte hasta ser titular fijo a final de campaña. Grandes partidos como el que le enfrentó al Barcelona, demostraron que Lacen podía dar mucho más de sí, respecto a lo que hasta ahora había mostrado.

Irregularidad por bandera, se ha destapado en este Mundial de Brasil, como componente de uno de los conjuntos revelación del campeonato, sin llegar a ser titular, pero cuajando grandes contiendas como la ya finalizada frente a Alemania.

El futuro de Lacen es una incógnita pendiente de resolver este mercado estival. El jugador no está del todo cómodo y la afición tampoco confía en él. Entre Cosmin y su nuevo cartel tras el Mundial, quedará la decisión.

Juan Rodríguez (18 partidos)

Juan no goza de la mayor calidad de la plantilla, pero sí se ve en él un esfuerzo y brega inmejorable en cada partido que se le ha visto. Esta temporada no ha sido la mejor ni la peor, acostumbrado está el espectador getafense a ver pasar a Juan como el suplente por excelencia en el medio campo.

Comodín como mejor carta de presentación, el ex del Depor, ha sabido cubrir todos los puestos donde el técnico en cuestión le haya asignado. Defensa, lateral, centro del campo o incluso la media punta. En el trivote o en el pivote defensivo, allá donde Juan jugó se supo de su esfuerzo y compromiso. Características que Contra supo ver y recompensar dándole mayor protagonismo a final de campaña.

Míchel (18 partidos)

Uno de los jugadores más tapados del Getafe. Obejtivo de críticas en los peores partidos de su equipo donde ha jugado el ex sportinguista, Míchel ha tenido que lidiar con los peores partidos de este Getafe 2013/14. Señalado por su falta de esfuerzo y compromiso, Miguel Marcos Madera, no ha logrado en sus temporadas como azulón, demostrar ser algo más que un suplente habitual.

Como recambio tampoco funcionó y Míchel vio la mayor parte de la temporada en el banquillo, con escasas oportunidades en la era Luis García, y con alguna intentona de mejora con Contra. Su futuro en el Getafe es incierto y no parece el idóneo para mejorar una plantilla que requiere calidad en la medular.