Álvaro Vázquez es otro. A pocos recuerda ya a aquel joven algo inseguro que aterrizó en Getafe hace unos años y que ofrecía muchas dudas. Cesión al Swansea el pasado curso mediante, el punta catalán es mucho más que la referencia del equipo. Es el enlace, el desmarque, la unión con una grada que le idolatra. Y él, está respondiendo con una simbiosis de trabajo y goles.

Con el tanto de ayer, el nueve azulón ha igualado su mejor marca goleadora en la competición doméstica que databa del curso 2011/2012. Entonces, anotó cinco dianas defendiendo la camiseta del Espanyol. Ayer, marcando precisamente frente a su ex equipo, Álvaro Vázquez igualó ese registro y dispone de catorce jornadas por delante para engrosas unos números que, de no haberse lesionado, seguramente serían mejores.

Precisamente el de ayer fue el primer gol que Álvaro marcó a su ex equipo. El punta definió magistralmente una gran jugada de Sarabia y puso el 2-0 en el luminoso. Mientras sus compañeros explotaban de felicidad, él no celebro el tanto. Se unió a la piña del equipo y volvió a su campo para enfundarse el mono de trabajo que siempre le acompaña. Fue su tanto más amargo, el gol con el que igualó su mejor marca goleadora en primera división.