Este sábado el Getafe dispondrá de una nueva oportunidad de ganar en casa, dejando atrás cuatro partidos consecutivos sin lograr los tres puntos. Enfrente estará el Cádiz, un equipo recién ascendido a la categoría de plata que está cuajando una gran temporada, como bien demuestran sus 40 puntos y su tercer puesto en LaLiga 1|2|3.
No será por tanto nada fácil para el conjunto de José Bordalás llevarse la victoria este fin de semana, aunque es el único salvoconducto para no desengancharse definitivamente de la lucha por los puestos de ascenso. Además, un triunfo de los getafenses valdría para que se colocasen con los mismos puntos (40) que los andaluces, a la espera de lo que haga el Tenerife.
La dinámica actual de este Getafe es muy similar a la de aquel partido de la primera vuelta, pues encadenaba varios encuentros sin conseguir ganar y jugando un fútbol poco efectivo de la mano de Juan Eduardo Esnáider. Un total de tres empates en las tres primeras jornadas de Liga (Mirandés, Numancia y Reus) al que se sumó además una pronta eliminación de la Copa del Rey a manos del Alcorcón.
Llegaba por tanto el conjunto azulón a Cádiz en una situación bastante complicada y con la necesidad de sumar los tres puntos como fuese. Sin embargo, y para su sorpresa, un recién ascendido a la categoría de plata le pasó por encima en los noventa minutos, aplicándole un serio correctivo con la derrota más abultada (3-0) de los azulones en lo que llevan de temporada 2016/2017, además de ser la primera en su vuelta a Segunda División.
Y eso pese a que el Cádiz tampoco había empezado nada bien el curso liguero, consiguiendo tan solo 2 de 9 puntos posibles (firmó tablas con Almería y Mallorca y cayó derrotado ante el Mirandés), aunque sí superando su eliminatoria de Copa del Rey al vencer en la tanda de penaltis al Levante con una gran actuación de su guardameta Jesús Fernández, quien debutaba aquel día y paró hasta tres lanzamientos.
Un duelo de necesitados, por tanto, entre Cádiz y Getafe que se saldó con una contundente victoria local. Así lograba el conjunto andaluz su primer triunfo en Segunda después de seis años de ausencia, y precisamente contra el equipo que consumó su descenso a Segunda División en la jornada 37 de la campaña 2005/2006. Aquel 7 de mayo de 2006 el Getafe se impuso por 3-1 en el Coliseum Alfonso Pérez, lo que supuso, además del descenso de los cadistas, la despedida de uno de los ídolos de la afición getafense, Gica Craioveanu.
De igual forma que ahora, también entonces el conjunto del sur de Madrid pecaba de no materializar sus ocasiones en goles, lo que había costado ya varios puntos. Todo lo contrario que el Cádiz, que se valía del acierto de un enrachado Alfredo Ortuño, con tres goles en las tres primeras jornadas de Liga, para sacar puntos vitales para su equipo en el inicio de temporada, evitando que se hundiese desde el inicio en la tabla por sus malos resultados.
Precisamente esa racha goleadora del ariete murciano la sufrió en gran medida el 'Geta' en sus propias carnes. Comenzó avisando con una ocasión antes de primer cuarto de hora de juego, aunque no pudo rematar con acierto el centro de Álvaro García, muy incisivo por la banda izquierda. Sí aprovecharía otro envío suyo poco después para estrenar el marcador adelantándose al 'Cata' Díaz en el remate dentro del área. El Getafe apenas reaccionó, y tan solo Molina a balón parado pudo inquietar la portería defendida por Alberto Cifuentes.
Ya en la segunda parte, el Cádiz siguió a lo suyo y a punto estuvo de hacer el segundo en varias ocasiones. Finalmente, Sería Aitor García el encargado de aumentar la ventaja de los andaluces ya casi en la conclusión del choque con un tiro raso desde fuera del área al que no pudo llegar Vicente Guaita. El hambre de gol de Ortuño no cesó, y en el tiempo añadido cerró la goleada gracias a una falta indirecta desde dentro del área que sorprendió a la numerosa barrera del Getafe.