El Getafe revivió de nuevo sus más oscuras pesadillas en Murcia. Si el choque de este sábado podía servir como bálsamo en la herida que se han autoafligido los madrileños desde hace ya varias jornadas, lo que realmente evidenció el resultado final (2-0) ante el UCAM Murcia es que el desfallecido cuadro azulón ha reabierto más su profunda llaga.
Una primera parte en La Condomina que no contó con un dominador claro, pero que se decantó pronto gracias a la enorme efectividad del cuadro universitario. De la mano de su capitán, Juan Góngora, quien no jugaba desde el pasado 20 de noviembre, los murcianos salieron al verde convencidos de exhibir una cara diferente a la mostrada en el Coliseum Alfonso Pérez en la derrota (2-0) de la primera vuelta.
No tuvieron que intentarlo en demasía los futbolistas de Francisco, que en la primera ocasión del choque encontraron un valioso premio a través de una falta directa. Un punto débil que no terminan de corregir y que sigue costando muchos puntos a los azulones, prácticamente incapaces de frenar a sus rivales cuando las ocasiones llegan a balón parado. Tal es así, que Góngora consiguió batir la meta de Alberto con un magistral lanzamiento de falta en el minuto 13, que fue rozado por el portero aunque no lo suficiente para evitar el primer tanto local.
Intentó responder con la misma moneda el Getafe instantes después mediante una falta directa de Damián Suárez que se fue alta, aunque la ocasión más clara para los visitantes llegaría en un envío de Álvaro Jiménez que a punto estuvo de alcanzar Jorge Molina. Ambos equipos apenas desplegaron desde entonces su juego, excesivamente trabado por las continuas interrupciones y numerosos parones en cada acción.
Ante esa tesitura, Góngora volvió a sacar su guante antes del descanso para poner una gran asistencia desde el costado izquierdo, de nuevo a balón parado, que Jona aprovechó a la perfección para aumentar la renta en el marcador. Marcaba así el ariete malagueño su décimo gol este curso, demostrando por qué es el máximo artillero universitario.
Tras el descanso, el Getafe se volcó en la portería defendida por Biel Ribas en busca del empate. De esta forma, llegó la oportunidad más clara de la segunda parte para los del sur de Madrid. Álvaro volvía a desbordar a su defensor para ceder el esférico a Damian Suárez, que remataba al larguero algo forzado, aunque libre de marca. Antes, una acción en área getafense acabó en susto tras un duro golpe en la caída de Manuel Sánchez, por lo que el centrocampista tuvo que retirarse.
Faurlín buscó recortar distancias de cabeza en un córner a falta de 20 minutos, bien respondido en la siguiente jugada por Collantes en el área opuesta, ante la pasividad de la zaga del Getafe, obligando a la estirada de Alberto García. También David Fuster, quien entró desde el banquillo, contó con su ocasión tras apurar línea de fondo y rematar demasiado escorado ante la salida de Biel Ribas.
El marcador no se movió hasta el final, pudiendo ser avivado en varios contraataques del UCAM que no pudieron concretar ni Vicente en primer lugar ni Collantes tan solo un minuto después. Así moriría el duelo en La Condomina, con un Getafe desesperado que se fue sin marcar pese a contar Cala con un remate claro que acabó en las manos del portero de los murcianos en los últimos minutos.
Con este triunfo del UCAM Murcia, los de Francisco se colocan 14º por el momento con 36 puntos y encadenan cuatro partidos consecutivos sin perder, lo que les aleja de los puestos de descenso. Por su parte, el Getafe mantiene la 6ª posición gracias a sus 44 puntos, aunque la ve amenazada peligrosamente tras las victorias de Huesca y Lugo, a uno y tres puntos de diferencia respectivamente.
