Era un partido para recobrar la esperanza, pero el Granada CF no pudo pasar del empate contra el Sporting de Gijón. El equipo de Lucas Alcaraz, quien regresaba al Nuevo Los Cármenes, solo pudo quedarse con un punto en un encuentro en el que no hubo goles y sí muchos nervios en los jugadores de ambos equipos, que no estuvieron acertados de cara a gol.
Antes de que el balón echara a rodar sobre el verde del Nuevo Los Cármenes, hubo un homenaje los deportistas granadinos que participaron en los Juegos Paralímpicos de Río 2016 y José Manuel Ruiz hizo el saque de honor. También se guardó después un minuto de silencio por el fallecimiento del exjugador del Granada CF Pérez Andreu y del pequeño Antonio Villena, jugador del We Are Football FC.
Alcaraz introdujo varias novedades en la alineación. Primeramente, dejó fuera de la convocatoria final a Mehdi Carcela y a Jérémie Boga, pues había citado a 20 jugadores y tenía que hacer dos descartes. El portero y la línea defensiva fueron los mismos que jugaron en el Calderón: Ochoa, Tito, Lombán, Vezo y Gabriel Silva, mientras que los cambios fueron en el centro del campo y en la línea de ataque. Uche acompañó a Angban en la medular, mientras que Kravets jugó en la delantera junto a Ponce. Andreas Pereira e Isaac Cuenca ocuparon las bandas.
'Unidos por una pasión', el Granada CF comenzó el partido con los ánimos de su afición. Llevó la iniciativa del juego el equipo granadino, como Alcaraz comentó que debía hacer en la previa del encuentro. Balón circulando para Angban, Uche, Pereira, Ponce y Kravets, sobre todo el ucraniano, bastante activo. Él gozó de la primera ocasión, en la que remató de cabeza fuera tras un saque de esquina (8').
Poca intensidad e imprecisiones en la primera mitad
Los rojiblancos tenían el balón pero se mostraban imprecisos en los pases, por lo que los acercamientos al área fueron escasos. El Sporting, no llevó peligro al área de la portería de Ochoa hasta el minuto 20, con un disparo raso de Burgui desde la izquierda que atajó el mexicano.
Pereira pecó de individualismo después en una jugada en la que intentó buscar ángulo y cuando chutó se topó con la defensa, cuando tenía a otros compañeros para pasarle el balón. Cuenca también probó un chut, quizá recordando el buen disparo que realizó en el Calderón, pero se marchó muy desviado (31').
La grada de animación del Nuevo Los Cármenes no paró de animar en una primera parte que, por momentos, cayó en fase de somnolencia. Solo una salida del área de Cuéllar para despejar un balón que le llegaba a Kravets (33') o una jugada de Burgui, que cayó ante Uche pero que fue fuera de juego (40'), fueron destacadas hasta el receso.
Un Grananada CF más enchufado
Alberto Bueno entró por Ezequiel Ponce en la segunda parte, en la que el Granada CF salió mucho más intenso. Nada más arrancar, Vezo tuvo una clara oportunidad. El portugués remató de cabeza un balón colgado en el área por Pereira pero Cuéllar estuvo providencial para desviar el esférico.
Los rojiblancos llegaron más al área, pero estuvieron imprecisos. El Sporting también tuvo algún acercamiento más avanzada la segunda mitad, pero Ochoa desbarató la oportunidad que tuvo Castro.
La lluvia comenzó a arreciar en Granada, pero no aminoró en demasía los cánticos de la afición, que intentó apoyar al equipo. Sobre el verde, Bueno intentó conectar con Kravets, pero su pase se fue demasiado largo. Llegaron después los cambios: Javi Márquez por Angban y Viguera por Castro. Un poco antes, Abelardo puso en liza a Nacho Cases por Rachid.
La intensidad en aumento provocó que Uche y después Sergio vieran una amarilla, este por una dura falta sobre Márquez. Alcaraz quemó su último cartucho con la entrada de Atzili por Pereira (79'), mientras que Abelardo retiró a Burgui, que se marchó muy lentamente y pitado por la grada, y dio entrada a Víctor.
La igualdad la pudo romper Kravets con un disparo alto y desviado tras una asistencia de Márquez, pero más cerca aún estuvo Cop, ya en el descuento. El jugador del Sporting no acertó a rematar un balón que se paseó por el área y que le llegó a un palmo de la portería, cuando justo tenía solo delante a Ochoa. El Sporting lamentó la ocasión fallada y el Granada CF dio gracias por poder amarrar, al menos, un punto que no sabe a mucho, más bien a nada.