Salvatore Sirigu no podrá sentir el calor del Estadio Municipal Butarque, al menos, de momento. El cancerbero del Sevilla FC ha sido sancionado con dos partidos alejado de los terrenos de juego por el Comité de Competición de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF). 

El cancerbero sevillista propició en la sexta jornada liguera un codazo en la espalda al delantero del Athletic, Aritz Aduriz, lo que desembocó en su expulsión inmediata, además de un penalti favorable a los rojiblancos que el propio Aduriz se encargó de transformar. Dicha acción aconteció en el minuto 88 del encuentro, cuando los hombres de Jorge Sampaoli buscaban a la desesperada firmar las tablas ante el combinado de San Mamés. La acción cometida por el guardameta dejó perpleja a la grada y a los allí presentes, puesto que Sirigu ya poseía en su poder el cuero cuando llevó a cabo la agresión, lo que llevó al colegiado a no dudar a la hora de tomar su decisión. Finalmente, el choque acabó 3-1. El Athletic Club de Bilbao se llevó los tres puntos y el Sevilla FC, la sanción de su portero. 

El artículo 123.2 del Código Disciplinario de la RFEF ha sido el encargado de dictar la sanción del jugador italiano, que no jugará ni ante el Deportivo Alavés ni contra el Club Deportivo Leganés tras el parón por los compromisos de las selecciones. 

Sirigu que ha disputado, durante la presente temporada, dos partidos con la zamarra sevillista, ha encajando un total de tres goles, uno de ellos ante el Eibar y dos ante el Athletic. Tras la decisión que ha tomado la RFEF y que ha sido conocida durante este miércoles, Sirigu tendrá que dejar paso a Sergio Rico que, previsiblemente, será el futbolista que defienda los palos de la portería de la tropa del Nervión en el Estadio Municipal Butarque el próximo 15 de octubre.