Que Asier Garitano es el técnico que más éxitos y alegrías ha cosechado en el banquillo pepinero es una verdad absoluta que nadie en la parroquia de Butarque se atreve a negar. Sin embargo, todos por mejores o peores que seamos tenemos debilidades, y el bueno de Garitano no iba a ser menos. El CD Leganés ha tenido un inicio de temporada irreprochable, más aún, teniendo en cuenta que es la segunda temporada que el club juega en la máxima categoría del fútbol español. Sin embargo, las últimas jornadas han dejado una sensación un tanto agridulce, con la que seguro el Lega no quiere terminar el año.

Los sinsabores de los últimos partidos

El Leganés ha pasado de remontar un partido en casa frente al Villarreal para ganar por tres goles a uno, para acabar perdiendo en Riazor frente a un Deportivo de la Coruña, que a priori esta temporada se muestra inferior que los madrileños. Después de la confianza que les dio el triunfo ante el “submarino amarillo”, los pepineros se llevaron un varapalo en Galicia del que tendrán que reponerse de inmediato si quieren acabar el año de la mejor manera posible, y no con el sabor amargo de haber desperdiciado un comienzo tan bueno como este.

Los problemas vienen siempre juntos

En tres jornadas consecutivas el CD Leganés se ha enfrentado a Sevilla, FC Barcelona y Valencia, cayendo derrotado en los tres.Todos los equipos tienen trayectos difíciles a lo largo de la temporada. Pero si miramos al calendario y dejamos todo lo demás a un lado podemos apreciar que el Leganés ha jugado de manera muy cercana entre si con los equipos más fuertes de la Liga Santander. En tres jornadas consecutivas el CD Leganés se ha enfrentado a Sevilla, FC Barcelona y Valencia, cayendo derrotado en los tres. Después vino el partido frente al Villarreal donde consiguió volver a la senda del triunfo.

Garitano no es el técnico de las grandes citas

En los tres partidos citados anteriormente se produjo algo contradictorio. Es cierto que por plantilla y presupuesto el Sevilla, Valencia y Barcelona son superiores al conjunto blanquiazul, como admitían las declaraciones de Garitano tras perder contra el conjunto che: “Ni jugando bien nos da para ganar”. Y es que Asier Garitano ha realizado buenos planteamientos en los choques más duros a los que el equipo ha tenido que hacer frente hasta el momento. Sin embargo, los resultados no han acompañado a las estrategias del técnico pepinero

Barcelona y Valencia dos claros ejemplos

Garitano nunca ha pecado de cobarde y tampoco lo ha hecho frente a los grandes equipos.Los partidos frente al Valencia y Barcelona son buenos ejemplos de los hechos de los que hablábamos anteriormente. Garitano nunca ha pecado de cobarde y tampoco lo ha hecho frente a los grandes equipos. En el partido frente al Valencia la idea era clara, dominar el centro del campo. Y así lo hizo en las primeras jugadas del choque hasta que un gol de falta para los valencianistas cambió el curso del encuentro. Frente al Barcelona planteó un sistema más compacto que cerrara los espacios. Pero la gran novedad en el partido frente a los hombres de Ernesto Valverde fue colocar a Amrabat en punta. Con el marroquí en punta, se crearían más espacios gracias a su movilidad. De hecho, si Amrabat hubiera materializado las ocasiones que tuvo frente al FC Barcelona probablemente estaríamos hablando de un partido distinto. Por lo tanto, no podemos admitir la afirmación de que Garitano no afronta bien los partidos contra los grandes equipos por los malos resultados que haya cosechado hasta el momento. Garitano es un técnico valiente y cabe recalcar que es la segunda temporada del Leganés en Primera División, por lo que el margen de mejora de técnico y entrenador son bastante grandes todavía.