Las bajas han atizado fuerte al CD Leganés durante todo el trayecto de esta temporada. Actualmente, se encuentran varios jugadores pepineros en la recámara debido a problemas físicos. Uno de ellos es Darko Brasanac, que cayó lesionado hace dos semanas en el encuentro ante el Eibar.

En su tercer partido liguero consecutivo, el serbio se vio obligado a abandonar el terreno de juego antes de lo esperado. Tras un fuerte golpe con Diop encaminó el camino hacia el banquillo ante la imposibilidad de continuar disputando el partido. Precisamente en su mejor momento con la camiseta blanquiazul, contando con minutos como consecuencia de las numerosas rotaciones que se veía obligado a realizar Asier Garitano por la acumulación de partidos. Después de cuajar buenos minutos ante Espanyol y Getafe volvió a formar parte del equipo inicial ante el Eibar.

El medio del campo se encuentra bajo mínimos. La marcha de Erik Morán dejó en horas bajas a la medular del cuadro madrileño. Teniendo en cuenta los partidos ante Girona, Real Madrid y Las Palmas a los que se suman el de Atlético de Madrid y Málaga de la próxima semana, volverá el cansancio tan apreciable durante la estancia en Copa del Rey. Ahí se encuentra el gran problema, escasean efectivos y apenas cuentan con tres mediocentros. Además, Rubén Pérez no se encuentra disponible de cara al encuentro del miércoles por acumulación de tarjetas.

A día de hoy se desconoce la fecha en la que Brasanac volverá a la baraja de Garitano. Se aproximan partidos complicados para el Leganés y necesita contar con el máximo de jugadores posibles. Tras el Málaga se encuentran Athletic, Sevilla, Valencia y Barcelona, enfrentamientos exigentes ante rivales de gran nivel. La distancia sobre el descenso es más que aceptable, pero el objetivo se encuentra en lograr cuanto antes la salvación y poder respirar tranquilamente tras una temporada soberbia.