El Levante UD visita el Ramón Sánchez Pizjuán con el objetivo de mantener –o aumentar, dependiendo de lo que acontezca el resto de la jornada- la distancia con sus perseguidores. Los ‘granotas’ llevan nueve victorias en los últimos diez partidos –tan solo el Alcorcón en Santo Domingo pudo frenar a los de Muñiz-, lo que les ha permitido conseguir un colchón de 17 puntos respecto al tercer clasificado, el Cádiz CF, que marca los puestos de ascenso directo.

El Sevilla Atlético, en cambio, lleva cinco partidos sin ganar –tres empates y dos derrotas-, concretamente desde la victoria por 5-3 frente al Real Oviedo en enero. Esta mala racha, ha llevado a los hispalenses a acercarse a posiciones peligrosas, a pesar de haber estado durante casi toda la primera vuelta coqueteando con los puestos de ascenso y playoff.

Para el partido del próximo domingo, Juan Ramón López Muñiz, el técnico del Levante UD, tendrá a su disposición a casi toda su plantilla, a excepción de Abraham y Rubén García, que arrastra molestias musculares en los isquiotibiales de la pierna derecha. En la convocatoria del técnico asturiano para el partido del próximo domingo, ha destacado especialmente la ausencia del central madrileño “Chema” Rodríguez, en una decisión aparentemente técnica. Los que vuelven a una convocatoria son Toño –después de cumplir sanción ante el Córdoba CF-, Saveljich y Paco Montañés, el autor del gol que le dio la victoria al Levante UD en el partido de la primera vuelta en el Ciutat de València, y que vuelve después de tres meses de lesión.

Muñiz mantiene su discurso

En la rueda de prensa previa al encuentro del domingo, el técnico del Levante UD, Juan Ramón López Muñiz, mantuvo el discurso precavido que le ha caracterizado durante toda la temporada y destacó las virtudes del equipo andaluz. “Tenemos que ser un buen equipo de segunda y sobre todo estar muy mentalizados de donde vamos porque es un equipo que es un filial que compite bien, trabaja bien, que tiene jugadores desequilibrantes. Además, destacó la buena imagen que dio el filial sevillista en su visita a Valencia, a principios de temporada. “Si retrocedemos un tiempo era un equipo muy armado. En Valencia llamó la atención por su experiencia. Llama la atención que te maneja el partido con experiencia, a pesar de que sea un filial”.

Además, el técnico asturiano restó importancia al hecho de jugar en el Ramón Sánchez Pizjuán. “El estadio es un estadio de primera de uno de los mejores equipos de Europa, pero no tenemos que olvidar que vamos a jugar un partido de segunda”.

Muñiz, fiel a su estilo, quiso restarle euforia a la situación actual del equipo, consciente de la gran cantidad de encuentros que quedan por disputar. “Entiendo que fuera se desate la euforia, que estén contentos. Es una buena señal, porque eso es que están haciendo un buen trabajo los jugadores, y el club y el equipo para conseguir un buen objetivo, pero dentro no puede haber euforia hasta que no se consiga nada. Estamos en febrero, queda competir contra casi todos, porque al final llevamos cuatro partidos de la segunda vuelta, y a partir de ahí ir sumando y ver a qué podemos aspirar”. A pesar de ello, destacó el momento de forma de los suyos. “El equipo está haciendo una gran temporada basada en la humildad, el orden y el trabajo y no se puede perder porque todavía quedan cuatro meses de temporada”.

Buenos precedentes

El Sevilla Atlético es un rival que históricamente ha sido propicio para el cuadro valenciano. El Levante UD y el filial hispalense se han enfrentado en cinco ocasiones, con un balance de cuatro victorias ‘granotas’ por una de los andaluces. Además, el Levante UD ya sabe lo que es afianzar un liderato en el Ramón Sánchez Pizjuán. Lo hizo en mayo de 1979, en una de las últimas jornadas del grupo II de Segunda División B. Por aquel entonces, los ‘granotas’ luchaban por hacerse con uno de los dos puestos de promoción a Segunda División y, aunque en aquella ocasión no pudieron pasar del empate ante el Sevilla Atlético, supieron aprovechar el tropiezo del Gimnástic de Tarragona para aumentar una diferencia que, al final del campeonato, les sirvió para lograr el ascenso.

Aunque la situación se pueda asemejar con la de aquella tarde de 1979, la tesitura actual del Levante UD es mucho más favorable, ya que la distancia con el tercero es de 17 puntos –frente a los cinco que tenían por aquel entonces-, y porque el equipo trata de luchar por el ascenso a la máxima categoría, lo que les permitiría regresar al feudo de Nervión la próxima temporada, aunque para jugar contra el primer equipo del Sevilla FC.

Posibles alineaciones.

Con la ausencia de Chema y de Rubén, y la vuelta a la convocatoria de Toño, el once del Levante UD en Sevilla parece que será el mismo que logró las seis victorias consecutivas entre diciembre y enero.