Tras finalizar el partido que enfrentaba al Levante UD contra el Reus Deportiu en el Ciutat de València ambos entrenadores pasaron por la sala de prensa. En su turno, Juan Ramón López Muñiz mantuvo el diálogo habitual, pese a que su equipo no había pasado del empate ante el conjunto catalán y a que venían de perder en Getafe. "Por mí que legue (el ascenso) y me da igual el día, porque sea el que sea respiraremos y tendremos una sonrisa de muerte", dijo en un primer momento al ser preguntado por una posible fecha. Y lo cierto es que el con el empate, esta se retrasaría. El ascenso, que muchos citaban para el sábado próximo en Cádiz pasaría por vencer en tierras andaluzas y que el domingo terceros factores se dieran: casi imposible. Por lo tanto, habría que esperar una jornada más, y sería en el Ciutat con la afición blaugrana ante el Real Oviedo. 

Muñiz trató de serenar el ambiente. "Lo bueno es la ventaja que tenemos y que, con este empate la diferencia de 19 puntos (respecto al tercero) se mantiene" sostuvo. Nada más a destacar del juego de un Levante UD que salió dormido y solo quiso ganar el partido en la faceta final del encuentro. "Estar tanto tiempo en primera posición y con tanta diferencia no es fácil y lleva un desgaste, pero el equipo lo está llevando bien", trató de excusarse el míster asturiano.

Una vez más, Muñiz quiso destacar que es difícil competir con las garantías del Levante en una competición tan igualada, en la que cuanto más se acerca el final, más se juegan todos los rivales. "Si ves todos los partidos todos son muy similares. Es la jornada 34, llevas muchos kilómetros, los puntos tienen mucha importancia y hay mucha tensión. Estás en el final del camino y ahora cuesta mucho más. Todos los equipos suman muchos menos puntos en el tramo final. Estamos en una época más o menos normal de juego. Es importante trabajar por la portería a cero y desde la paciencia".


Por último Muñiz ensalzó el trabajo del equipo catalán: "Era un partido frente a un adversario que lleva muy pocos goles en contra. Lo ha demostrado, está trabajado, ordenado, tiene velocidad y te puede sorprender. Nos costó trabajo desbordar las dos líneas de cuatro. Era un partido para tener paciencia. En estos partidos cuando te equivocas lo puedes pagar caro".