Este sábado, desde las 18:00 horas -horario con el que los granota consiguió en su último duelo casero el ascenso matemático-, el Levante UD peleará ante el Girona por el título de la categoría. Solo serviría una victoria, y en esto no hay secreto: subir como primero implica más cantidades de dinero, además del prestigio del campeonato.

Los recuerdos no invitan al optimismo, ya que los chicos de Muñiz cayeron por 2-1 (gol de Martins) en su visita a Montilivi, en aquella oscura época que fue bautizada como “la minicrisis del Levante UD” que había perdido dos partidos consecutivos fuera de casa (Real Oviedo y Girona).

Esta vez, los granotas tratarán de revertir la situación y vencer a los gerundenses ante su afición, que todavía no conoce la derrota en lo que llevamos de curso. Solo Getafe, Cádiz y Reus rescataron un escueto pero valioso punto en su visita al Ciutat, habiéndose ido el resto de rivales de vacío de su visita a Valencia.

Pero desde que se consiguiera el ascenso matemático con aquel 1-0 (Postigo, min.55) ante el Real Oviedo hace poco más de una semana, poco importa haber patinado en la visita a Vallecas (2-1) y haber consumado así la sexta derrota del año. En Orriols se respira tranquilidad, buen rollo, paz, compañerismo y ganas de competir para lograr el último objetivo del curso: el campeonato. Y no importa haber perdido en Madrid porque llegarán más oportunidades; que el amplio margen con respeto al Girona, segundo clasificado, permite disponer de un amplio margen de error, y los jugadores lo saben.

Así pues, desde el club ya preparan el partido, que si bien puede ser decisivo no es vital para lograr el campeonato. Un patinazo, prolongaría a otra jornada la posibilidad de certificarlo, aunque en el Levante UD no se fían y quieren cerrarlo en cuanto antes. Esta semana, la novedad ha sido salir del hábito rutinario de entrenamientos cambiando el césped por la arena. Los granotas han sido partícipes hoy de una jornada en la arena de La Patacona, ante algún que otro bañista incrédulo con lo que veía.

Tras haber hecho algunos ejercicios físicos, se ha tocado algo de balón con el juego del fut-vóley y más tarde algunos se han dado el primer chapuzón de la temporada. Sin duda alguna, una forma de cambiar y hacer más dinámica una semana que se antoja clave para el futuro de la entidad.