En un año que se planteaba com largo y difícil como el pasado, se esperaba que más de uno diera un paso al frente. Y uno de ellos, fue Jason, que llegaba al primer equipo para disfrutar en él su primera temporada. Y los resultados no tardaron en llegar por su parte, pues ha sido una pieza importantísima dentro del esquema de Muñiz, hasta el punto de resultar ser el segundo máximo goleador del equipo. Y por supuesto, una actuación así acaba por despertar el interés de otros equipos, y especial y particularmente uno, el Deportivo de la Coruña, equipo de la tierra del joven extremo.

“No voy a tener prisa. Me quedan dos años”, afirmaba el jugador a La Voz de Galicia cuando le preguntaban por su renovación. Aparentemente, se muestra algo disconforme con diversas decisiones de la dirección levantinista. El jugador tiene aún contrato para dos años, y tiene completamente paralizadas las negociaciones con la entidad de Orriols, que busca otorgarle un salario acorde a su rendimiento del año pasado, a cambio de, claramente, blindarlo y atarlo. Aseguró además haber tenido una oferta de “un club de una liga muy importante”, no obstante, “el club la ha rechazado”.

Cabe añadir que el jugador está rodeado de rumores que apuntan a su salida, al Deportivo de la Coruña especialmente. No obstante, él asegura únicamente estar centrado en “hacer una temporada sobresaliente”, antes de afirmar sentirse “muy querido por la afición” y desear “devolverles el cariño con goles y esfuerzo”.

La operación por David Soria se complica

Y mientras sigue el Levante moviendo sus fichas de cara a mantener a Jason, también persiste en sus intentonas de traerse a David Soria. Y es que la entidad levantinista ya ha recibido la petición de Muñiz, de tener tres porteros de nivel en el primer equipo. Y una de las opciones para apuntalar la portería era el ya mencionado guardameta del club hispalense. Sin embargo, los sevillistas se resisten a desprenderse del guardameta, que confía en tener más minutos este año. Todo acabará en manos de Berizzo, que quiere evaluar al guardameta durante la pretemporada.

Días atrás, se habló también del estado de Koke Vegas. El cancerbero del filial ya jugó en el primer equipo este año, en el empate en Tarragona a un tanto, donde realizó un buen partido, pero tuvo imposible detener un libre directo de Juan Muñiz que estableció la igualada. Se ha descartado que esté en el filial tras su descenso, por lo que quedan dos opciones, primer equipo, o cesión; pues el club no se plantea desprenderse de él definitivamente. Seguramente, el futuro de Koke dependerá de como se resuelva la operación de David Soria.