La desolación llega a Palamós de nuevo. Después de luchar todo un partido y conseguir nada menos que la derrota, el Llagostera sigue con sequía de puntos y oportunidades decrecientes a medida que la lucha por la permanencia se vuelve más ardua. El Mallorca B consigue una victoria balsámica que le aleja de los puestos de descenso y le permite avanzarse en su lucha por los mismos objetivos que el Llagostera.

Pulso débil

La primera parte del partido se ha caracterizado por un control balanceado de la pelota por parte de ambos equipos, con oportunidades muy tímidas para ambos. Alsina y Gálvez se han medido tácticamente y ninguno de los dos ha conseguido inquietar al rival.

Pol y Raúl para los visitantes, y Samu y Diego han mantenido sus respectivas defensas firmes y el peligro no se presagiaba. El juego estaba contenido en las bandas y en el centro del campo, pero con ninguna oportunidad destacable, llegó rápidamente el tiempo de descanso. Quién se avanzara primero, quién aprovechara mejor el fallo del rival, se llevaría el partido.

Con la miel en los labios

Con la mente fría y las ideas más claras, ambos conjuntos salían de nuevo al campo para intentar derrotar a su rival. El Llagostera no quiso demorarse en su ofensiva, y con la incorporación al campo de Albarrán, llegó la primera oportunidad clara. Este, en carrera por su banda derecha daría un centro a Manu Gavilán que superaría al portero pero no al palo derecho de la portería, frustrando así la oportunidad más clara de todo el partido. 

A partir de aquí Oriol y los suyos estaban predispuestos a ganar. Y llegó la mejor oportunidad del partido. Un centro al área fue a parar por error al brazo de Juanjo. El árbitro lo advirtió y impuso la pena máxima al equipo. Habían pasado tan solo diez minutos desde el inicio de la segunda parte y el Llagostera se iba a adelantar. 

Marc Martínez sería el elegido para llevar a los suyos a la senda de la victoria. Sin embargo, la portería se le hizo pequeñísima y mando el balón a las nubes. Desgraciadamente, a partir de aquí no solo perdieron su mejor oportunidad, sino que perdieron el partido.

El Llagostera se puso nervioso. Los pases no llegaban a su destino, los disparos no encontraban la portería y la ilusión se desvanecía. Cédric aprovechó una contra para irse de todos en carrera y quedarse casi a solas con el portero, con la defensa a la espalda. Moragón fue certero y consiguió la parada del partido.

No obstante, Cédric solo allanaría el camino a Caye Quintana, que en la próxima jugada supo zafarse tácticamente de la defensa rival para así quedarse solo frente a Moragón de nuevo. Esta vez el Mallorca B no perdonó y el jugador sentenció el partido. 

El Llagostera no fue capaz de reaccionar. El equipo no respondía, el juego no fluía y solo quedaba poner una última marcha que parecía no llegar. Ni un remate de cabeza de Jordà en el último minuto del partido, desviado por muy poco, consiguió evitar la derrota.

Final frenético

Se avecina un final frenético de la temporada para el Llagostera. Con solo 11 jornadas por delante, quedarán muchos deberes pendientes para el Llagostera. Por otro lado, el Mallorca B deberá de intentar abrirse paso a través de la clasificación y seguir con los buenos resultados para mantener el resultado. No obstante, el primer equipo mallorquín también deberá de superar las dificultades para mantener la categoría y así no desplazar a su filial a Tercera.

En definitiva, Oriol Alsina y los suyos deberán de sortear las numerosas piedras del camino y así demostrar su potencial, todo ello en un espacio temporal reducido y caracterizado por los nervios, la ansiedad y la necesidad del resto de equipos en la parte baja. 

Puntuaciones VAVEL 2B

UE Llagostera

Mallorca B

Moragón 6.5 Valens 5.5
Masó 6.5 Juanjo 6.5
Diego 7 Pol 6.5
Samu 7 Raúl

7

Fúster 5.5 Antoine 6.5
Vivancos 6 One 6.5
Rubén Martínez 6 Cortes 7
Marc Martínez 4.5

Serrano

7

Manel

6 Caye Quintana 7.5
Nando 6 Cédric 7.5
Gavilán 6.5 Borja 7
Suplentes
Pablo 5.5 Ángel 6
Albarrán 6.5 Sastre 6

Jordà

6 Pablo 6