La temporada del Málaga CF está siendo muy distinta a la realmente esperada al principio del curso. Los boquerones están más cerca de la zona de descenso que de la zona europea de la que Juande Ramos hablaba en su primera rueda de prensa cuando comenzaba la temporada. Dos entrenadores diferentes y dos porteros distintos a lo largo de la difícil campaña no evitan este negativo dato.

Ni tan siquiera el farolillo rojo de la clasificación, que tiene más pie en segunda que propiamente en primera, ha recibido tantos goles como lo ha hecho el Málaga en las primeras partes. Esto puede darse a salir relajados al terreno de juego o propiamente a no preparar bien los inicios de juego. 

Esta mala racha comenzó en el Power8 Stadium con un gol de Gerard Moreno. A partir de ahí: Jaume Costa, Sansone, Momo, Nano, Joaquín, Aduriz, Deyverson, Carrasco, Gameiro (x2), Viguera, Borges, Rodrigo, Medrán, Vietto (x2), Ben Yedder, Vitolo, Iago Aspas, Sergio Ramos (x2), Piatti, Lemos y Adrián González han batido en los primeros cuarenta y cinco minutos a alguno de los guardametas que han defendido la portería malaguista.

Al ser un dato de goles encajados, veinticinco, nada más y nada menos, las zonas más señaladas son el portero y la defensa, y aunque bien es que muchas veces se ha logrado remontar esos goles adversos, un equipo que quiere mantener la categoría no puede irse casi siempre al descanso con goles encajados. Es un dato muy preocupante, ya que se ha pasado en poco tiempo de ser uno de los equipos menos goleados, casi siempre a la misma par de los grandes, a sufrir esta negativa estadística. El 'Gato' Romero no ha sabido solucionar este problema, y cómo la racha de resultados continúe por el mismo camino, pronto llegará a La Rosaleda el tercer entrenador del curso.