En la pasada temporada 2016/2017, se produjo el descenso a Segunda División del Granada CF al ocupar el último lugar de la clasificación. Con ello, en la actual temporada están compitiendo únicamente el Málaga, Sevilla y Betis como representantes andaluces.

En la temporada 2013/2014 llegaron a jugar en la máxima categoría cinco equipos andaluces, lo que a nivel estadístico corresponde al 20 % de los equipos representativos de Primera División. En este caso hablamos del Málaga, Sevilla, Betis, Granada y Almeria. Nunca ha habido más de cinco equipo de una misma comunidad autónoma en primera división; existieron cinco equipos además en la temporada 2008/2009 y 1971/1972 (equipos andaluces) y en la temporada 1930/1931 ( equipos vascos).

En la jornada siete de la presente temporada, se ha producido hasta ahora el único enfrentamiento entre andaluces en el Ramón Sánchez Pizjuán entre el Sevilla FC y Málaga CF con un resultado final de 2-0 a favor de los sevillistas. En este caso, el equipo malaguista llegaba en una situación agónica en resultados, donde no conocían la victoria y se enfrentaba a un equipo local que era el favorito para lograr los tres puntos. El equipo visitante, como en otras ocasiones en esta liga, mantuvo a equipo contrario controlado, manteniendo un buen nivel defensivo pero, cuando mejor estaba sobre el terreno de juego, provocaron dos contragolpes que le costaron muy caro, encajando ambos goles. Con ello, si el equipo se limita a defender y apenas a atacar era imposible que las victorias llegasen. 

La estrategia aplicada era similar al que se llevó a cabo en el Wanda Metropolitano ante el At.Madrid, esperando atrás conjuntado y esperando su oportunidad a la contra. Una línea defensiva de cinco, apoyado por Recio y Adrian, permitieron que apenas se generase peligro en el área de Roberto y que en la primera mitad la situación estuviese controlada. En el segundo tiempo, ambos equipos tuvieron sus ocasiones y se produjo un penalti más que discutible de Rosales a Correa, aunque el defensa visitante no protestó en demasía. Con ello, en el minuto 68 llegó el gol del equipo sevillista y a partir de ahí cambió radical del partido y nuevo bajón psicológico de los malaguista al igual que otro  partidos, que provocó que en el minuto 70 el mediocentro Rolón perdiera en el centro del campo un balón y Muriel corriese de forma veloz hacia Roberto e hizo el 2-0. 

El marcado, sorprendentemente, mostraba un resultado que no era lo que se había visualizado en el terreno de juego, pero lo que cuentan en los partidos son los goles y los errores cometidos penalizaban al equipo de Michel. De aquí al final del partido, el equipo sevillista se mantuvo seguro para poder conservar la victoria y ahondar más en la herida de los blanquiazules, al igual que se intuía que Michel tenía las horas contadas como técnico de la primera plantilla aunque, como sabemos en la actualidad, al final la directiva ha sabido mantenerlo en su puesto de entrenador.