El Mallorca consolida su tercera victoria consecutiva en esta Segunda División. Los mallorquines haciendo más que le rival en un partido prácticamente sin chispa, se quedan los tres puntos en la Isla y salen, por fin, del pozo hundido hace dos jornadas escasas.

La primera parte empezó floja por parte de los dos conjuntos. Tuvieron que esperar diez minutos los aficionados que vieron el partido para ver alguna internada de los dos equipos. En el minuto diez, de repente, llegó todo a la vez. El primer disparo del partido lo realizó el joven Kasim, ya consolidado en la primera plantilla de Valeri Karpin, que sin problemas paró el portero del Sabadell, Nauzet. También llegaron el primer córner, y los dos a la vez. Después de romper el hielo con las dos jugadas a balón parado, el partido se animó, pero no demasiado, y vimos más jugadas de peligro, todas ellas mayoritariamente a balón parado. Pero la más clara hasta entonces no fue a balón parado sino que fue una gran cabalgada de Cendrós por todo el costado derecho sin oposición, centró raso sin problemas para el despeje del central Olivas, pero este falló y le cayó a Marco Asensio en el área pequeña que sin pensarlo ni un segundo más chutó pero rebotó en el otro central, ahora lo hicieron bien, Hernández.

El encuentro, sobrepasando ya el ecuador, estaba totalmente dividido. Era por así decirlo, un partido dual. En el minuto veintisiete, la tuvieron otra vez el Mallorca. Falta escorada en el costado izquierda que se la prepara Marco Asensio para centrar al segundo palo y Kasim y Pereira casi rozaron con la cabeza lo que pudo ser el primer gol local. Sin embargo, el rival en la siguiente jugada tuvo la misma falta calcada pero en el otro costado, en este caso el derecho. Era una falta para centrarla y buscar la cabeza del compañero, pero Collantes se desquitó y probó fortuna disparando cerrado y le dio al palo derecho de la portería de Cabrero. A falta de diez minutos para que acabara  la primera parte, y esta jugada fue la más clara del partido para el equipo catalán. Los dos equipos se fueron a vestuarios con la sensación de haberles faltado algo más para merecer el primer gol.

Empezaba la segunda parte en el Iberostar Estadi con la segunda mitad igual que como acabó la primera. El partido era muy monótono, no ocurría nada relevante en el comienzo del partido, no había ataques claros y los dos equipos estaban en muchas ocasiones estáticos. Sin embargo, con la entrada por parte del Mallorca de Scepovic y Arana revolucionaron el partido, le dieron esa chispa al ataque que empujaron con más presencia en ataque para el conjunto local. Justo fue entrar los dos cambios y el serbio Scepovic le agarraron claramente en el área rival y el comité Fuente Ramos no tuvo ningún problema para pitar la pena máxima. Y el balón para intentar anotar el primer gol del partido lo cogió otro cambio, Aarana. El balón lo puso en el punto de penalti y marcó el primer gol para el conjunto local.Justo marcado el gol, Arana cogió otra vez el balón para ponérselo debajo de la camiseta y dedicarlo al embarazo de su mujer.

Marcó el Mallorca, y a partir del gol, un equipo creció, el Mallorca, y el otro ya se hundió definitivamente, el Sabadell. El Mallorca llegaba con más claridad en las ocasiones de gol. Una muy clara la tuvo Scepovic a centro de Marco Asensio, pero el portero del Sabadell realizó una magnífica parada y la sacó a córner. El Sabadell estaba totalmente descolocado en el partido.

Faltaban diez minutos para que concluyera el partido, y el conjunto de Miquel Olmo quisieron reaccionar, ya tarde, con algunas jugadas cómo la de Aridai de cabeza pero salió desviada de la portería de Cabrero. El Sabadell quiso hacer el trabajo de noventa minutos en cinco. Sin más dilación, acabó el partido en el Iberostar Estadi con tres puntos más para los de Valeri Karpin.

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Sobre el autor
Lluís Hernández
Periodismo en Palma de Mallorca.