Después de cuatro partidos consecutivos empatando, la afición grana esperaba con ansias este partido. El partido en San Mamés, un estadio majestuoso. Allí, en la casa del colista de la Segunda División, el Nàstic controló siempre el partido y cuando apretó el acelerador se encontró con una goleada a favor que pone punto y final a cuatros jornadas de empates pero que alarga la racha más positiva: el equipo de Vicente Moreno encadena diez jornadas sin conocer la derrota, algo que lo sitúa a solo dos puntos del ascenso directo a Primera.
Naranjo abrió el marcador
Después de unos primeros minutos abiertos en los que el Nàstic tuvo ligeramente un poco más de posesión, los tarraconenses tuvieron la primera ocasión del partido: centro de Mossa para Naranjo, quien remató a puerta y se encontró con la oposición del guardameta Ramiro, que rechazo el esférico con su pierna izquierda (13’). Cuatro minutos más tarde el Bilbao Athletic pudo abrir el marcador, pero Marí evito el 1-0 bajo palos con la cabeza.
Recién superado el ecuador de la primera mitad, en el minuto 24, llegó, esta vez sí, el primer gol del encuentro. Juan Muñiz no consiguió controlar un pase desde la derecha, pero sí elevó el balón con una vaselina que se convirtió en un centro para Naranjo, quien aparecía solo por la izquierda. El pichichi del Nàstic, de primeras, remató el balón y lo mandó al fondo de la red local para hacer el 0-1.
En el 37’ los protagonistas del gol, Muñiz y Naranjo, se invirtieron los papeles, convirtiéndose el segundo en el asistente. Esta vez, pero, Muñiz chutó flojo desde la media luna y Remiro atrapó sin problemas la pelota. Sólo unos segundos después, en el área contraria, Villalibre giró sobre sí mismo y disparó a puerta obligando a Reina a reaccionar para evitar la igualada. Después Iriondo centró al área, donde Olaetxea se alzó más que los centrales granas, aunque su remate se marchó a la izquierda de la portería defendida por Manolo Reina.
Frenando la reacción
En el cuarto minuto de la reanudación José Naranjo pudo haber hecho el segundo gol de la tarde cuando se quedó solo frente al portero, pero se hizo un autopase demasiado largo, algo que dio ventaja al guardameta navarro Remiro. El Bilbao Athletic había salido mejor en la segunda mitad y buscaba el empate con ansias. Pudo haberlo conseguido en el 55’ cuando, después de una rápida jugada, Santamaría chutó a portería y el balón rozó el palo izquierdo de Reina.
En el minuto 56 Juan Muñiz protagonizó una gran jugada individual que acabó con un pase para Naranjo. Este, de espaldas a portería, dejó el balón para Aburjania, quien, desde más de veinte metros, marcó el 0-2 con un disparo que entró en la portería de Remiro rozando el palo derecho.
Festival de goles
El filial rojiblanco había salido a buscar el empate y se encontró con el segundo gol grana, algo que hundió sus ánimos. Esto lo aprovechó el Nàstic, que en el 69’, después de una gran jugada combinatoria culminada por Suzuki, Jean Luc y Emaná, acabó con el gol del último. El Bilbao Athletic pudo recortar distancias poco después con un chut de Santamaría que rozó el palo derecho. A continuación la ocasión fue de los visitantes: pase de tacón de Emaná que dejaba a Jean Luc solo, pero el extremo no consiguió superar a Remiro.
Emaná marcó dos goles en menos de diez minutos
El Nàstic tenía los tres puntos en el bolsillo, pero el instinto goleador de Achille Emaná aún no estaba calmado. Era el 78’ cuando el camerunés recuperó el balón y lo cedió a Xisco Muñoz, quien montó el contraataque. Jean Luc fue en encargado de centrar desde la línea de fondo y Emaná volvió a marcar, haciendo el 0-4 definitivo.