Quedó más que comprometida la situación de Osasuna tras una nueva derrota en la pasada jornada de la Liga Santander. Los navarros fueron vencidos ante su gente, en El Sadar, por el FC Barcelona de Luis Enrique, en un partido donde los culés apenas llegaron a sufrir. Dicha derrota fue la quinta consecutiva, cuarta en liga, que encadena el combinado navarro desde la llegada de Caparrós al banquillo. Una cifra que sin duda, desagrada a la hinchada rojilla, que pide ya un cambio en su equipo.

Y por dicho cambio están pasando, o lo aparentan, no Osasuna; sino algunos de sus rivales. El primero es el Granada, que precisamente ante los navarros volvió a la vida con un triunfo en Copa del Rey. Una vez vencieron a los de Caparrós, lograron su primer triunfo en liga ante el Sevilla y un valioso empate en Málaga. El Sporting también puntuó, y de hecho venció, hace dos jornadas, también ante Osasuna, y estuvo muy cerca la pasada de hacerlo en el feudo perico. 

Los rivales de esta jornada, el Depor, también entran dentro de este pelotón de equipos que están mejorando con el paso de las jornadas. Su goleada a la Real Sociedad les devolvió a la vida, y solo la fortuna les impidió sorprender al Real Madrid. El Leganés, además, encadena un par de empates de infinita valua que llegaron tras vencer precisamente a los navarros. Otro que también levantó cabeza con un triunfo ante Osasuna es el Alavés, que con 8 puntos en 5 jornadas, ha logrado coger un pequeño colchón de puntos. Por último, el Real Betis aparenta haber dado con la tecla con la llegada de Víctor Sánchez del Amo.

En cambio, hay un equipo que acompaña a Osasuna en esta espiral de malas sensaciones y disconformismo. Se trata del Valencia, que marca la permanencia empatado a puntos con el Sporting. Hay una clara división entre plantilla, por un lado, y el entrenador junto a la afición y la prensa por el otro. Prandelli parece estar intentando empujar a sus jugadores para que actúen con la profesionalidad mínima que él demanda. Resulta muy difícil despejar la incógnita del futuro de este equipo, pero por ahora, está metido de pleno en la lucha por no desdencer. Esta semana no jugarán, ya que el Real Madrid disputa el Mundialito de Clubes, pero en el primer partido del próximo año, se producirá un partido de vital trascendencia. Los valencianos visitarán El Sadar.