En un partido con dos partes muy marcadas, Osasuna y Rayo Vallecano empataron a un tanto.

En los instantes previos, se apareció por el estadio del Sadar el fantasma de los partidos ante Nàstic de Tarragona, y Valladolid, en los que la nieve obligó a aplazar el partido. Cerca de una hora antes del inicio del partido, empezaron a caer los primeros copitos de nieve, ligeros, y que no parecían inquietar a la parroquia rojilla, pero a media hora del choque, arreció un poco la nieve, y se empezó a temer lo peor, pero la nieve dio tregua durante toda la primera mitad.

Antes del partido, Javier Eseverri realizó el saque de honor, pues en el mismo día anunció su retirada a final de temporada del Club Deportivo Xota, en la Liga Nacional de Fútbol Sala.

Primera parte

Una primera mitad que fue un ida y vuelta constante, un encuentro a tumba abierta entre dos equipos con altas aspiraciones.

El primer equipo en dar avisos fue el conjunto vallecano, primero fue Adrián Embarba con un tiro desde la frontal que detuvo Herrera, luego Álex Moreno con un centro, y de nuevo Adrián Embarba con otro tiro lejano.

Se estiró Osasuna, y la primera ocasión llegó a manos de David Rodríguez, que desvió con la cabeza un disparo de Roberto Torres, y centros laterales que no encontraban destinatario por parte de Coris.

A partir del minuto 30 se empezó a partir más si cabe el partido, Álex Moreno y Kike Barja mantuvieron un precioso duelo para el espectador en banda derecha.

Kike Barja precisamente fue quien generó una acción clara de gol, que despejó bien Alberto Garcia, la réplica la tuvo Raúl de Tomás, con un disparo que sacó bien Sergio Herrera.

Al filo del descanso fue cuando se adelantó el Rayo Vallecano, Adrián Embarba recogía un balón en tierra de nadie, se colaba entre los dos centrales rojillos, y soltaba un latigazo brutal con la pierna izquierda a la cepa del poste, un disparo para Sergio Herrera totalmente imposible y anotaba el 0-1.

Segunda mitad

Sin embargo, la segunda parte fue diferente.

El conjunto rojillo dio un paso adelante, y a su vez, el Rayo Vallecano se echó atrás, dando por bueno el 0-1, y empezando a perder tiempo.

El equipo empezó a adquirir raza, adquirir una garra, y fue entonces cuando el equipo y la grada se fundieron en uno, 11.185 espectadores aupando al equipo, y entonces Osasuna se vino arriba, presión asfixiante a la salida de balón del conjunto de Míchel, centros al área, tiros lejanos, un asedio casi al completo.

Kike Barja se echó el equipo a la espalda, y siguió con su duelo con Álex Moreno, un duelo que hasta que al canterano rojilla le llegó la gasolina, lo ganó, y así fue como llegó el gol.

Kike Barja, escorado en la banda derecha, puso un centro perfecto, de eso que se van cerrando, alejándose de la portería, y puestos perfectos para un compañero que venga en carrera, y así fue, centro medido de Kike Barja, que como un tren, un tanque entró en carrera, y no era otro que Oier, el gran capitán, el de Estella empató el partido, que estaba en un punto difícil para el conjunto rojillo.

Y justo empezó a nevar de nuevo, tintando de épica los 30 últimos minutos de partido, y mostrando al espectador, una bella estampa, de las de antes, del fútbol añorado.

A falta de Barja, en esos momentos se echó el equipo a la espalda esta vez Quique González, el vallisoletano empezó a jugar de todocampista, viniendo a recibir los balones al centro del campo, haciendo carreras de 40 metros, y luchando como el que más, sin embargo su esfuerzo, no tuvo la recompensa esperada en forma de gol.

Tras el gol, Osasuna bajó un poco su nivel de intensidad, introdujo cambios, y el conjunto vallecano también, los cambios de Osasuna eran más de técnica, y los del conjunto vallecano, más de músculo.

Borja Lasso y Miguel de las Cuevas no aportaron exactamente todo lo que se esperaba de ellos, y el Rayo se vino arriba los últimos 10 minutos, Osasuna y el Rayo empezaron a tantear el terreno, pues la nieve hacía difícil tanto el juego, como la visibilidad.

Al final, en un partido disputado, y difícil, el reparto de puntos hizo méritos a las acciones de ambos equipos.