La Arandina CF cumple en este 2017 treinta años de historia. Desde que en 1987 se fundará el club a orillas del Duero, el equipo ha militado en Regional, Tercera y ha alcanzado su cima en la 2ª División "B", a la que ascendió en 2015 y donde quiere consolidarse como uno de los conjuntos más importantes de Castilla y León. La temporada pasada sufrió hasta las últimas jornadas y, a pesar de perder en El Montecillo ante un descendido Compostela, pudieron salvar la categoría en detrimento del Sporting de Gijón "B". 

Un curso después, la Arandina quiere repetir gesta, aunque el aumento de equipos en liza por escapar de esas posiciones de riesgo han perjudicado los intereses de los burgaleses. En estos momentos solo el Somozas tiene menos puntos que los pupilos de Emilio Ferreras que a cada jornada que pasa apuran más y más sus opciones de alcanzar la deseada permanencia. 

Prueba de estas dificultades son los resultados cosechados por el equipo. Lleva diez jornadas sin conocer la victoria y ni siquiera los dos últimos empates a cero ante Tudelano y Osasuna "B" invitan al optimismo. La llegada de hasta cinco caras nuevas en forma de refuerzos en este mercado invernal estaba orientada a mejorar las prestaciones ofensivas de los ribereños. Edgar Agudo, Momar Ndoye y Jonathan Rubio son el nombre de alguno de estos fichajes, jugadores con experiencia que deben dar un paso adelante para salir del pozo cuanto antes. 

Para lograr esa cifra de los 45 puntos que puede marcar el descenso, la Arandina debe empezar a sumar de tres en tres. Palencia, Guijuelo y Boiro están perdiendo muchos partidos pero si los arandinos no ganan sus envites poco o nada importa que sus rivales fallen. 

Los jugadores que este domingo trataran de complicar las cosas a una SD Ponferradina que llega de caer eliminada en la Copa Federación pero de vencer 2-0 al mencionado Boiro serán, salvo sorpresa: Zabal; Edu Payá, Sergio Noche, Trigueros, Nacho; Saúl, Leo Ramírez; Ndoye, Omar, Ruba y Edgar.