Verdiblanco contra violeta, cántabro contra castellano o Santander contra Valladolid; todas estas confrontaciones evocan a los partidos entre Real Valladolid y Racing de Santander. Todo un clásico del fútbol modesto entre dos equipos que están en décimo segunda y décimo tercera plaza de la clasificación histórica respectivamente.

El choque de mañana en el Sardinero contra el filial pucelano despierta la nostalgia de los aficionados racinguistas; de aquellos años dorados con las semifinales de la Copa del Rey y la UEFA. Sin embargo, esos tiempos han cambiado, y ahora la realidad del Racing es más cruda. El enfrentamiento esta vez es en Segunda División B, con menos presupuesto, menos público en la grada, menos aspiraciones,  más presión por sumar y con un filial de por medio.

Racing y Valladolid se han enfrentado en 50 ocasiones

El duelo entre ambas escuadras se ha repetido hasta en cincuenta ocasiones, con máxima igualdad, ya que ha ganado dieciocho el Valladolid y dieciséis el Racing, el resto empate. Dos equipos venidos a menos, en descenso en Segunda y en Segunda División, respectivamente. La mala situación del conjunto blanquivioleta tiene ciertas similitudes con la situación cántabra. El cambio de entrenador en el banquillo de Zorrilla puede resucitar a un equipo sin fe pero con grandes jugadores. Más o menos lo que le sucede al equipo entrenado por Pedro Munitis, repleto de futbolistas consagrados en Segunda y Segunda B, pero que no han arrancado aún en la jornada diez.

El último encuentro disputado entre ambos terminó 1-4 a favor de los pucelanos, gracias a los goles de Timor, Valiente, Pereira y Óscar, y David Concha, actual jugador del Numancia, para los locales. Un partido invernal en el que los pocos aficionados del Real Valladolid que se atrevieron a subir, por los problemas en carretera con la nieve, disfrutaron de una contundente victoria, engañosa por cómo se sucedió el partido.

La irrisoria cantidad de puntos que alberga el Racing, unido a la posible sanción por el fichaje de Morris, obligan a los cántabros a conseguir la victoria. El rival, el Valladolid B, ha sufrido una semana convulsa con cambio de entrenador incluido. El efecto en cadena provocado por la destitución de Garitano del primer equipo, ha provocado la llegada del viejo conocido Miguel Ángel Portugal. El entrenador del filial, Rubén Albés, ha subidoal cuerpo técnico de Portugal y el técnico del cadete A, Borja Jiménez, se encargará del B.

El Valladolid B viajará con el entrenador del cadete

Dos colosos en horas bajas, tanto Real Valladolid como Racing, buscan volver a la categoría reina del fútbol español. El nuevo entrenador violeta, Miguel Angel Portugal, conocedor del juego cántabro, a buen seguro pasará el informe a Jiménez sobre la puesta en escena de un equipo venido a menos en las dos últimas jornadas tras perder en casa contra el Pontevedra y no pasar del empate a cero frente al Somozas.

El encuentro del domingo será el primero que enfrentará al filial pucelano con el Racing de Santander, dos equipos con caminos paralelos. La andadura del Valladolid comenzó con cuatro empates a cero, prueba fehaciente de las características del equipo: buena defensa y problemas con el gol.

Los enfrentamientos entre estos dos equipos tendrán mañana una nueva página, pero esta vez con un filial como protagonista. A medio plazo los aficionados racinguistas, y al fútbol en general, esperan la vuelta de un histórico a primera, al igual que el Real Valladolid. Sin embargo, en esta categoría los cuentos de la lechera no sirven, el Racing debe sumar los tres puntos frente al Valladolid B, que tratará de pescar en río revuelto a orillas de El Sardinero.