El Racing enseñó el camino en Guijuelo. El camino hacia la mejoría, el camino hacia los playoffs, el camino hacia Segunda División. Si el conjunto cántabro quiere ascender a final de temporada deberá mostrar la cara vista en tierras salmantinas. Un equipo intenso, trabajado, compacto, sin fisuras... se notó el trabajo que Pedro Munitis y su cuerpo técnico llevan haciendo desde la pretemporada. Al fin, cinco meses después del inicio de la misma, parece que han dado con la tecla.

Solidez defensiva y ritmo ofensivo

Y lo han hecho en un momento muy delicado. La derrota ante la Cultural, dando mala imagen, y el empate ante el Burgos habían dejado muy tocada la imagen del técnico cántabro y los pitos se estaban convirtiendo en un tema de confrontación en El Sardinero. Pero en Guijuelo, ante uno de los teóricos capos de la categoría, el equipo tiró de personalidad y de trabajo para llevarse una merecida victoria, mostrando la mejor cara del año.

El Racing supo adaptarse a las exigencias del rival y del terreno de juego

Como decíamos antes, un equipo sólido y compacto en defensa, no mostró apenas fisuras ante un Guijuelo cuya idea de juego es bonita, combinación y juego de toque, pero que resultó inoperante ante el trabajo defensivo verdiblanco. El Racing supo leer a la perfección el encuentro, en un campo pequeño, en un campo de Segunda B donde la defensa y el fútbol directo cobran improtancia. Fue ahí donde se estrelló el conjunto verdiblanco en Aranda de Duero, Tafalla y Somozas y fue ahí donde parece levantar el vuelo en Guijuelo.

En ataque, el Racing se mostró más directo a la vez que eficaz. Rápidas y fluidas combinaciones para enlazar contragolpes que recuerda a la época de Paco Fernández en la categoría de bronce. En aquellos momentos, eran Lafuente, Iñaki y Koné los que eran letales en los contragolpes. Ahora son Óscar, Artiles y Coulibaly. Se buscó menos elaboración y más combinación rápida para llegar cuanto antes a la meta rival y así, el equipo gozó de más oportunidades de gol. Dioni se pudo hinchar de no ser por su desacierto y la gran actuación del guardameta local Kike Royo.

Granero y Caneda, claves en defensa

Individualmente, ciertos jugadores se consolidan en el esquema de Pedro Munitis. La vuelta de Borja Granero y César Caneda parece haber solidificado la retaguardia cántabra. La veteranía del central se antoja importante y la vuelta del alma racinguista, del mediocentro racinguista, parece vital. No solo por su aportación deportiva sino, también, por su garra y capacidad de liderazgo. Caneda fue el jefe de la defensa pero Granero fue el jefe del equipo, una vez más.

Peña se ha erigido como comandante del fútbol verdiblanco

A su lado, Álvaro Peña está descubriendo un nuevo ecosistema dentro de su juego. Es aquí donde se produce la fluctuación defensa-ataque que tan buen resultado dio en Guijuelo. El futbolista vasco ha pasado de extremo a mediocentro, desbancando a uno de los mejores de este arranque de temporada, Dani Rodríguez. Pero Peña se muestra cómodo junto a Granero. El valenciano abarca todo: defensa, ataque... la distribución es más segura con un guardaespaldas de gran recorrido. La locomotora valenciana es el alma del equipo y, a su lado, Peña aprovecha para mover el juego.

¿El nuevo Concha?

Siguiendo con el ataque, la aportación de las bandas resultó determinante. Óscar parece convertirse en el nuevo David Concha. Canterano, que ilusiona a la afición y encima corresponde esa ilusión con grandes actuaciones sobre el verde. Ya lo hizo ante el Burgos y lo ha confirmado en Guijuelo. Desborde, descaro, llegada... el cántabro parece haber desbancado a fichajes como Cerro o Migue. En el otro flanco, la calidad de Artiles sigue dejándose ver. Aunque algo irregular, el canario posee magia en sus botas.

La dupla Dioni-Coulibaly parece asentarse

Y arriba, una dupla que puede darle alegría al Racing. El equilibrio. La velocidad y la estabilidad. Dioni fija, busca el espacio y parece estar encontrando la confianza que le estaba faltando. En la entrelínea, aparece un Coulibaly con más ansia que nunca tras su periodo de suplencia. El senegalés se las prometía felices al inicio pero el toque de Munitis parece que le ha servido para espabilar.

¿Sotres o Santiago?

Por último, sin negar el nivel de Dani Sotres, Óscar Santiago se mostró segurísimo bajo palos. Por alto, por bajo, en las salidas, con el pie... la tranquilidad que aportó a sus compañeros fue enorme, pese al escaso trabajo al que fue sometido ante el conjunto chacinero.

Aportaciones desde el banquillo como las de Dani , Cerro o Migue serán importantes

Y todo esto, a la espera de la recuperación de hombres llamados a ser importantes como Iñaki o Borja San Emeterio, cuya baja apenas se ha notado debido a las buenas actuaciones de Docal y Fede. Hombres como Chus Hevia o Dani Rodríguez tienen que hacerse importantes aunque, en estos momentos, otros como Coulibaly, Dioni o Peña les hayan ganado la partida.

Lo que es cierto es que este parece el camino, el camino hacia la recuperación, hacia el playoff, que se sitúa a solo tres puntos. Habrá que refrendar las sensaciones en enfrentamientos algo más asequibles que, de ir bien, podría acercar al Racing hacia su homónimo ferrolano. El líder espera el próximo 20 de diciembre pero antes, el Racing debe pasar con nota sus enfrentamientos ante Cacereño, Tudelano, Lealtad y Compostela. Aun así, hoy los aficionados verdiblancos sonríen por fin al atisbar que su que su equipo va encontrando el camino.

Resumen del partido ante el Guijuelo (1-2)