Celta y Racing se han enfrentado en Barreiro en un partido con alternativas para ambos equipos, donde cántabros y gallegos han buscado la victoria hasta el final sin éxito. El conjunto de Viadero teminó el encuentro con un jugador menos por la expulsión de Álvaro Peña.

El Racing, de más a menos

El Racing comenzó el partido con fuerza y buscando la portería de Néstor, con especial ahinco el delantero César Díaz. Los primeros minutos fueron un monólogo racinguista, jugando bien pero sin encontrar la portería celtiña. Minuto a minuto los gallegos se han rehecho y a partir del medio tiempo han igualado el juego de la contienda con varias llegadas, especialmente a la contra, muy peligrosas. 

El Racing, por medio del canterano Sergio Ruiz, dispuso de la mejor ocasión en el minuto 31 gracias a un potente disparo lejano que, con ayuda de Néstor, se estrelló con la madera. Con el miedo en el 'cuerpo' del Celta, Viadero movió ficha: Coulibaly entró por Óscar Fernández, que se quedó boquiabierto ante la decisión del técnico cántabro de sustituirle de manera tan temprana.

Borja Iglesias marcó por tercera vez consecutiva a los santanderinos

Tan solo un minuto después iba a caer el jarro de agua fría sobre los cántabros. Gol de Borja Iglesias, el de siempre. Jugada de los gallegos y el ariete celeste aparece para rematar ante Iván Crespo. Con el uno a cero los locales se hicieron con el dominio del balón y llegaron sus mejores minutos. La primera mitad terminó con una gran parada de Iván Crespo ante un tiro de Juan Hernández desde lejos. 

La segunda parte, una locura

Sin cambios y sin control. Así salieron ambos equipos al Municipal de Barreiro para afrontar los últimos cuarenta y cinco minutos. Los celestes no fueron capaces de ampliar la ventaja en dos ocasiones clarísimas. La más clara de Juan Hernández, que disparó fuera tras una gran asistencia y jugada personal de Allende, que tiró un caño a Julen Castanaeda y habilitó a Juan Hernández.

En diez minutos el partido dio un giro radical. En el minuto 55 Dani Aquino, tras una buena jugada y un chut cruzado, que batió a Nestor y puso las tablas en el marcador. Los cántabros habían hecho lo más difícil, empatar con el tiempo suficiente de poder buscar la victoria. Tan solo cinco minutos después el Racing recibía un nuevo revés. Esta vez por parte del árbitro, que mostró la segunda amarilla a Álvaro Peña por un choque con un jugador gallego. El partido se ponía, de nuevo, muy cuesta arriba para los cántabros con 25 minutos por jugar.

Álvaro Peña vio la roja en el minuto 65

Tras la roja Viadero reestructuró el equipo con la entrada de Javi Cobo, en detrimento de César Díaz, para que Coulibaly ocupara la banda. En esta tesitura, las opciones cántabras pasaban por algún balón aéreo o una contra. Los locales, con el balón en los pies, buscaban velocidad y movimientos arriba para desajustar la zaga racinguista, muy desafortunada en general, y Julen y Granero en particular.

Pese a la inferioridad numérica, los santanderinos buscaron la portería de Néstor y a punto estuvo Dani Aquino de batirle, tras un rechace, con un remate de chilena. Tras la parada, Samuel Llorca cabeceó desviado un buen córner de Héber Pena. En este contexto se rompió el polémico balón Errejota, criticado en repetidas ocasiones por los jugadores, equipos e incluso AFE. En los últimos minutos no pasó mucho más, sin duda un partido loco, que se pudo llevar cualquiera de los dos conjuntos pero que dejó un reparto de puntos merecido.