Hay tardes en las que todo va mal. Son esas las que estaban formando parte de la actualidad del Rayo Vallecano semana sí semana también. Sin embargo, este fin de semana, un cúmulo de circunstancias, decisiones y casualidades trajeron de vuelta una alegría a Vallecas en forma de victoria. Los condicionantes han sido varios.

El caso Zozulya, temas extradeportivos aparte, se convirtió en un inesperado nexo de unión del rayismo. Antes de producirse la polémica, la afición estaba desencantada con el equipo, desunida, desilusionada. Sin embargo, en la previa y en el mismo partido, el rechazo a Roman Zozulya unió a todo el rayismo, no solo en los cánticos que pedían la dimisión del presidente, sino en la actitud de la grada de llevar en volandas al equipo. Ante una final como la que se preveía, era lo que se necesitaba, y funcionó. Volvió a sonar, mucho tiempo después, “La Vida Pirata” en Vallecas.

Los cambios de Baraja, el otro gran acierto de la tarde. El entrenador del Rayo demostró tener personalidad para dejar fuera de la convocatoria a varios de los pesos pesados del vestuario. Demostró también, como suele decirse, no “casarse con nadie”, puesto que dejó fuera de la convocatoria a Roberto Trashorras, Miku, Patrick Ebert, Razvan Rat y Zé Castro, todos ellos por decisión técnica, claramente señalados por su bajo rendimiento en los últimos partidos. En el once apostó por darle la titularidad a hombres como Dorado, Santi Comesaña, Diego Aguirre o el recién llegado Jordi Gómez, así como a Fran Beltrán, Galán y Cristaldo para tratar de mantener el resultado logrado tras un gol en propia meta de Fran Vélez a los pocos minutos que acabaría valiendo los tres puntos.

Pero si el Rayo sacó la victoria fue, en gran parte, gracias a Paulo Gazzaniga. El portero del Rayo sigue dejando muestras de su talento cada semana, y de momento no parece darle oportunidad al fichaje de este mercado, a Tomás Mejías. Ante el Almería se erigió como héroe al detener, entre otras ocasiones claras, un penalti lanzado por Fidel Chaves sobre la hora de partido. Está claro que el equipo debe seguir mejorando, pero Baraja ha salvado un ‘match ball’ y ha ganado un balón de oxígeno para sellar la permanencia.