Rayo Vallecano y Tenerife disputaron uno de los partidos más atractivos de la jornada por muchos motivos. El más destacado era el estado de forma en que llegaban ambos equipos, ya que los vallecanos desde la llegada de Michel han mejorado su juego, sus resultados y su confianza, mientras que los isleños pisaban el césped de Vallecas lanzados tras sus dos últimas victorias ante rivales directos. Con la buena racha de resultados de ambos conjuntos el partido prometía, y no decepcionó.

Y Amath Ndiaye, uno de los jugadores revelación de la categoría, tardó dos minutos en mostrar su carta de presentación. Velocidad, potencia y un desmarque para enmarcar para adelantar a los visitantes. El primer cuarto de hora fue de los hombres de Martí, conscientes de la importancia del partido. Sin embargo, un error de Suso Santana acabó con un buen disparo de Adrián Embarba que acabó en la red del ex guardameta franjirrojo Dani Hernández.

A partir de entonces no hubo un dominador claro, ya que el Rayo Vallecano buscaba llevar la batuta con Trashorras, Jordi Gómez, Fran Beltrán y Comesaña, mientras que a los tinerfeños tampoco les quemaba el balón en los pies aunque buscaban constantemente a Aarón y a Amath. Ya en el segundo acto, ambos equipos introdujeron cambios con el objetivo de alzarse con los tres puntos. Manucho por los locales y Jouini por los visitantes eran los hombres llamados a revolucionar el choque, aunque no llegaron a lograrlo del todo.

Entre todos los hombres durante el choque, con el paso de los minutos se iba haciendo cada vez más grande la figura de Fran Beltrán. A sus 18 años, y con un físico envidiable, se tiró corriendo los noventa minutos, bien jugando de interior, de mediocentro o de enganche. Jugó e hizo jugar recuperando muchos balones y asociándose con sus compañeros.

Con el choque a punto de finalizar, el aliento de la afición vallecana unido al arreón final de sus jugadores estuvo a punto de subir el segundo gol al marcador de los hombres de Michel, que en el descuento disfrutaron de tres ocasiones que no acertaron a materializar ante el portero del CD Tenerife. En definitiva, un punto que no sabe a mucho a ninguno de los dos y que les permite seguir vivos en sus respectivas luchas: uno en la pelea por el ascenso y otro por evitar el descenso.