El Rayo Vallecano recibía al filial del Sevilla en el Estadio de Vallecas. Ambos conjuntos llegaban con dos luchas totalmente distintas. Por un lado, el Rayo Vallecano está inmerso en la lucha de la parte alta de la clasificación y se encuentra peleando por los puestos de playoff. Enfrente, el Sevilla Atlético, que llegaba a Vallecas penúltimo en la tabla tras 4 jornadas seguidas sin sumar puntos.

Míchel decidió alinear de inicio a los mismos once futbolistas que jugaron en El Sadar la jornada anterior y  que consiguieron un punto frente a Osasuna. En cambio, el técnico del Sevilla Atlético, Tevenet, sí que presentaba muchos cambios en su once con respecto a su partido frente al Huesca. En total fueron 5 novedades las que presentó el entrenador andaluz. Una revolución.

El partido no empezó de la mejor manera para los locales. El Sevilla Atlético llegaba a Vallecas como el penúltimo clasificado de la tabla, pero sorprendió al equipo de Míchel. El Rayo no estaba cómodo sobre el terreno de juego, el filial del Sevilla entró muy bien al césped y creaba llegadas al área visitante, más de las que hubiera deseado el técnico local. En los primeros 10 minutos, tan solo dos disparos de Unai López y Baiano fueron lo más destacable del conjunto rayista.

El cuadro sevillista presentó un juego muy serio, sin conceder espacios arriba a los más peligrosos del Rayo, por eso al equipo de Vallecas le costaba llegar arriba, no existía una buena conexión entre tres cuartos de campo y los delanteros. En sendas ocasiones, el Rayo se vio obligado a lanzar desde lejos porque el Sevilla estaba muy bien plantado en el terreno de juego. Unai lo volvió a intentar desde lejos, pero sin fortuna. El ‘Chori’ Domínguez también probó suerte sin encontrar portería.

Además de estar bien atrás, el Sevilla Atlético también amenazó en alguna ocasión la portería de Alberto García. Carlos Fernández avisó desde fuera del área con un disparo que se marchó cerca de la escuadra izquierda. Sin embargo, la ocasión más clara de la segunda mitad fue obra de Curro, que mandó al palo la asistencia de Aburjania. Acto seguido, el propio Curro le enviaba un balón a Fede San Emetrio, que cabeceaba cerca de la portería de Alberto. El Sevilla Atlético estaba creando peligro.

El descanso llegó con mejores sensaciones para el equipo visitante, ya que dispuso de 3 ocasiones claras en los minutos finales de la primera mitad. A Míchel no le gustaba lo que veía y a la grada de Vallecas tampoco. Algo tenía que cambiar porque el Rayo no estaba cómodo, no había creado peligro arriba y el Sevilla Atlético podía haberse puesto por delante Si Curro hubiera estado más acertado. Por todo ello, hubo dos hombres que no entraron a la caseta en el descanso. Javi Guerra y Bebé se quedaron calentando intensamente.

La segunda mitad comenzó siguiendo el mismo guion. El Rayo jugaba con poca intensidad y el Sevilla estaba cómodo sobre el césped. No obstante, Míchel tenía una llave y la utilizó. A los 8 minutos de la segunda parte, Javi Guerra y Bebé entraron al campo sustituyendo a Trejo y al ‘Chori’ Domínguez.

A los recién incorporados, poco tiempo les faltó para revolucionar el partido. Un minuto después de entrar, Bebé le asistía un balón a Unai para que éste volviera a disparar desde fuera del área, esta vez con más peligro. Pero un minuto después, Adrián Embarba colgaba un centro que Javi Guerra convertiría en el primer gol del partido. Solo 3 minutos después de entrar al campo, Javi Guerra cabeceaba el balón al fondo de la red para abrir la lata.

El Rayo había conseguido algo difícil, conseguir el gol en un mal día. A partir del tanto de Javi Guerra, parecía que el conjunto vallecano jugaba más tranquilo. Los cambios aportaron aire fresco, soluciones y gol. Míchel quiso incorporar a Elustondo en lugar de Raúl de Tomás para dotar de equilibrio y fuerza al centro del campo.

La segunda mitad tenía un color diferente que la primera. Por eso, las mejores ocasiones fueron del Rayo Vallecano. Bebé fue uno de los más activos en ataque. También Unai López y Fran Beltrán lo intentaron llegando desde segunda línea y probando desde fuera del área. El Sevilla Atlético se vio más atascado en la segunda mitad y produjo mucho menos.

No obstante, al Rayo le costaba cerrar el partido y un gol de diferencia no era una renta tranquila. En cualquier ocasión el Sevilla podía dar un susto al cuadro local. Sin embargo, las esperanzas sevillistas se desvanecieron en el momento en el que Bebé sentenció el partido. El delantero portugués materializó el 2-0 en el 88’, cerrando así el encuentro.

Finalmente, el Rayo Vallecano hizo que los 3 puntos se quedaran en Vallecas. El partido llegó al descanso con malas sensaciones, sin que el equipo consiguiera encontrar la tecla; no obstante, Míchel pulsó el botón de la victoria desde el banquillo. Los dos cambios que entraron en el 53’, Javi Guerra y Bebé, arreglaron la tarde. Con esta victoria, el Rayo se mantiene arriba, en tercera posición y a tres puntos del ascenso directo.