No fue 2015 el año de Fabio Coentrao. El de Vila do-Conde apenas si pudo jugar en el primer tramo de la temporada, presa de constantes lesiones, y la figura de un Marcelo solvente y sus malas actuaciones cuando saltaba al campo, que le penalizaron hasta un punto de ser casi inexistente su participación en la dinámica del equipo.
En el primer año de Ancelotti, el portugués tuvo mucha mayor relevancia jugando, por ejemplo, como titular en la final de la Champions League ante el Atlético de Madrid. En este pasado año, Coentrao comenzó por llegar al tiempo de preparación lesionado, lo que ha acrecentado la sombra sobre su figura y las dudas sobre su validez para el Madrid, que siempre se puso en tela de juicio por el alto coste de un traspaso que nunca llegó a justificar con rendimiento constante sobre el campo.
Apenas seis partidos en 2015 tuvo Coentrao. El primero, el 10 de enero, en el que vio además una cartulina roja. No volvería a vestirse de corto hasta el 24 del mismo mes. En el único partido de todo el año en el que jugó los 90' con el Real Madrid fue el fatídico día del 4-0 en el Calderón. Además, sería titular en tres compromisos más, los tres únicos que disputó más allá de los anteriormente mencionados. Schalke, de nuevo Atlético aunque tan solo un minuto, y por último Valencia.
Al final, pasó lo que se venía viendo que sucedería. El club merengue le buscó una salida a Coentrao, y éste encontró sitio en Monaco, ocupando el lugar que dejó Kurzawa después de que el lateral galo se marchase al PSG en los últimos días de mercado estival. En Francia, el lateral portugués ha disputado 10 partidos entre la Ligue 1 y la Europa League, en los que ha sumado 876 minutos en los que ha logrado un gol.