Cuando en los primeros minutos el Bernabéu vio a un Madrid incómodo que no creaba peligro en ataque y concedía ocasiones en defensa, se temían un nuevo tropiezo en Liga en este nuevo año difícil para los pupilos de Zidane.

Sin embargo, el conjunto madridista se impuso al mal inicio y volvió a lucir esa pegada característica que hace tanto daño. En frente tuvo a una buena Real Sociedad que creó peligro pero no pudo anotar ningún gol. Cristiano Ronaldo, que hizo una gran segunda parte, se reivindicó en esta noche alegre en el Bernabéu.

Una Real cómoda en los primeros minutos

El partido comenzó con dos equipos muy parejos que se repartían el control de la pelota en el Santiago Bernabéu. El conjunto de Eusebio Sacristán no sufrió en exceso en la primera media hora de encuentro gracias a unos locales con una delantera apagada en la que su estrella, Cristiano Ronaldo, no estuvo nada acertado, y que apenas consiguió crear jugadas de peligro, tan solo alguna jugada aislada de Lucas Vázquez por la banda derecha.

De hecho, el astro portugués fue pitado por algún sector del Bernabéu en el primer periodo, como Benzema, en unas cuantas acciones que pasaron por sus botas y se fueron al limbo. Al ex del United se le vio frustrado durante la primera parte tanto consigo mismo como con el resto de sus compañeros. Toda esa frustración acumulada en los últimos partidos la liberó en el minuto 6 de la segunda parte cuando anotó gol resolviendo con una sutil vaselina la salida de Rulli.

La Real llegó pero no consiguió hacer daño Ofensivamente, a los vascos les faltó verticalidad en muchas de sus llegadas de la primera parte, lo que les impidió adelantarse. El Real Madrid volvió a ser ese equipo separado entre líneas de los tiempos de Ancelotti y eso permitió a la Real Sociedad poder realizar numerosas transiciones peligrosas, como algunas de Íñigo Martínez desde la línea defensiva. Eso sí, el conjunto txuriurdin combinó de maravilla en tres cuartos de campo con futbolistas de calidad como Oyarzábal o Canales y gozó de alguna ocasión de peligro importante como la de Juanmi en los minutos finales del primer tiempo.

En los quince últimos minutos el equipo de Zinedine Zidane apretó y consiguió tener más dominio de balón y el premio llegó con el gol de un Mateo Kovacic que fue de lo mejor del partido tras un gran pase de Cristiano Ronaldo.

Gol tempranero decisivo en la segunda parte

En el minuto seis del segundo acto llegó el gol de Cristiano Ronaldo que allanaba el camino del Real Madrid en los minutos que restaban de partido. El equipo de Zinedine Zidane salió con otra cara tras el descanso aunque la Real Sociedad se mantuvo en su idea de toque en la parte delantera y tuvo más la pelota que los blancos.

En el transcurso de la segunda mitad del partido vimos a un conjunto vasco con muchas más pérdidas de balón en el medio del campo, lo que le permitió al equipo local salir a la contra con mucho peligro.

Pero la acción que redujo las posibilidades de remontada del conjunto vasco ocurrió en el minuto 74, cuando el duro de Iñigo Martínez derribó a Lucas y se llevó la segunda tarjeta amarilla yéndose antes de tiempo a los vestuarios.

Comodidad merengue final

A partir de ahí se vio un partido en el que el Real Madrid estaba muy cómodo y apenas era amenazado. En ese contexto, después de una falta lateral para la Real, Keylor Navas inició un contrataque perfecto marca de la casa que convirtió en gol Morata tras un perfecto centro de Lucas Vázquez.

El marcador pudo ser mayor en los últimos finales, ya que la Real Sociedad fue un equipo vulnerable tras la expulsión de Martínez. Esto, junto a la frescura de los cambios, hizo que el Madrid llegase mucho más. Al final, triunfo del Real Madrid ante su gente para volver al buen camino.