El Real Madrid ha vuelto esta mañana a los entrenamientos tras la decisión de la Liga de Fútbol Profesional en que la se notificó la suspensión del partido ante el Celta de Vigo por problemas de seguridad en el estadio para jugadores y espectadores. El encuentro debía disputarse esta tarde pero las malas condiciones meteorológicas han desencadenado la suspensión del mismo y el aplazamiento a la espera de confirmación de nueva fecha.

El equipo aprovechó este hecho para ejercitarse en el campo tres de la Ciudad Real Madrid y completar la sesión con un  intenso calentamiento, ejercicios de posesión y un partido de dos tiempos.

Los jugadores siguen dejando libre la enfermería blanca pero Zinedine Zidane aprovechó el entrenamiento para incorporar a jugadores del Castilla como Lin, Seoane, Cedrés, Tejero y Nikos. Luka Modric y James Rodríguez fueron dos de los jugadores que trabajaron en el interior de la ciudad deportiva mientras que Gareth Bale y Dani Carvajal continuaron con su proceso de recuperación para intentar acortar los plazos marcados y estar a disposición de Zidane lo antes posible.

En el entrenamiento destacó el constante trabajo de Cristiano Ronaldo. El portugués, que cumplía treinta y dos años no pudo festejar con goles su onomástica y aprovechó el entrenamiento para celebrar cada uno de los que anotaba. El siete blanco sigue esforzándose cada día para afinar su puntería de cara al gol y volver a conquistar al Bernabeu marcando goles.

El equipo blanco afronta la última semana en la que jugará un solo partido ya que a partir de entonces volverá a la competición europea con dos partidos semanales. El sábado visitará el complicado campo de El Sadar con el reto de no dejar puntos en Pamplona y cuatro días después se enfrentará en Champions League al Nápoles del exjugador madridista Jose Callejón.