El Clásico dependerá en parte de la influencia en el juego del jugador más determinante del Barça, y seguramente más desequilibrante del planeta, Leo Messi, motivo por el cual la zaga merengue deberá impedir que el argentino levante la cabeza y tenga espacios para un posible pase o tiro a portería.

El juego pasa por su zurda

Este Barça ya no destaca tanto por sus interminables posesiones y dominio del balón. Con la salida de Xavi Hernández, el equipo perdió al 'maestro de ceremonias' del centro del campo culé. Ahora es Messi quien, con la ayuda de Iniesta y Busquets, pone el juego de tiqui taca en el Barça. El argentino empieza las jugadas en una posición más retrasada, con mayor visión de juego y más libertad para sus movimientos, aumentando así su capacidad para asociarse con sus compañeros de vanguardia. Sus pases detrás de la defensa desde la izquierda hasta los jugadores de banda derecha, que normalmente son Jordi Alba o Neymar, son una de las armas más decisivas del atacante blaugrana.

Su entendimiento con Neymar

A pocas horas del encuentro, Neymar ha entrado en la lista de convocados y viaja con el equipo, tensando aún más la cuerda entre el Barcelona y el TAD. Sin embargo, las probabilidades de ser alineado son mínimas y sin él Messi pierde a su mejor compañero de juego. El brasileño y el argentino se entienden a la perfección dentro y fuera del campo. Paco Alcácer es la principal alternativa a 'Ney', el jugador valenciano vive su mejor momento en el Barça, y cuenta con la confianza de Luis Enrique. Las otras opciones son Arda Turán, que acaba de recibir el alta médica, y Denis Suárez, que ya ha jugado en esa posición en anteriores partidos. 

Declaraciones de cómo frenarle

El técnico italiano Carlo Ancelotti pasó con nota el reto de parar a Messi cuando era el técnico del Real Madrid. En las 5 ocasiones que se enfrentaron, el argentino solo vio puerta en un partido. "Una defensa hombre a hombre con él es muy complicada, el marcador tendría que rendir a muy alto nivel. La mejor manera de limitar a Messi requiere de un gran esfuerzo de todo el equipo, estrechando la distancia entre las líneas y evitando que contacte con el balón", declaraba el actual entrenador del Bayern de Munich mediante una columna de opinión para un medio chino a principios del año 2016. 

“Es importante situar a un número alto de futbolistas en esa zona para destruir el mediocampo del Barça, impedirles jugar con libertad su fútbol. Eso también reduce las opciones de Messi y la probabilidad de que le llegue el balón, además le aleja de las posiciones donde más daño hace. El equipo debe estar unido, concentrado y no cometer ningún error”, seguía diciendo el italiano. 

También Di María, compañero en la selección argentina, habló antes de los octavos de final de Champions de cómo parar a Messi: “Difícil, creo que para poder pararle hay que hacerlo con el equipo entero, porque cuando no hace una genialidad él, deja solo a un compañero. Es complicado, pero si estamos al cien por cien y hacemos lo que dice el míster podemos pararlos. Creo que tenemos que centrarnos en hacer nuestro trabajo, lo que sabemos hacer, tener la pelota, porque al Barça le duele mucho no tener la posesión”.

21 goles al Real Madrid

Messi ha estado apagado en los últimos Clásicos, es por ello que el Barça quiere que el astro argentino rompa su mala racha en el Santiago Bernabéu, en el cual arrastra 37 meses sin ver puerta. Sin embargo, de sus 21 goles en los Clásicos, 12 los ha hecho en el Bernabéu, un 57,14%. El último lo hizo a lo grande, con un hat-trick en el Bernabéu, que le convertiría en el máximo goleador de la historia de los Clásicos. 

Foto uefa.com
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