Isco maravilla. Este fue uno de los titulares que apareció en la prensa española tras el partido del Real Madrid contra el Alavés, que el equipo blanco ganó por 3-0. El centrocampista brindó otro espectáculo sobre el césped del Bernabéu y marcó un gol por la escuadra desde una zona casi sin ángulo. A ello se sumaba una asistencia. Un recital más, un partido brillante.

Pero los vitorianos no fueron los únicos que acusaron la magia del malagueño. Todavía se guardaba lo mejor para el Sporting o Deportivo. Isco marcó dos goles para enmarcar a los asturianos tras una antológica actuación desde el minuto uno. Frente a los gallegos, asistencia y gol. 

Su último pase preciso para que Cristiano iniciase la conquista de la Liga fue contra su querido Málaga. Finalizó la temporada con su séptima asistencia, aunque en total de todas las competiciones acumuló nueve. El feudo madridista fue el primero que disfrutó esta habilidad del centrocampista. Athletic Club, Leganés y Deportivo, las víctimas. En la jornada 21, Balaídos vio como Isco asistía hasta en dos ocasiones a sus compañeros y dos partidos después, el Bernabéu volvió a festejar otros dos mágicos pases.

Los agraciados de su calidad no fueron más que delanteros: Benzema, Bale (2), Morata (2) y por supuesto, Cristiano Ronaldo (2). Un lujo tener a 'Magia' -como le llaman en el vestuario- al lado. 

Solo por detrás de Kroos

El internacional español igualó así su estadística liguera de la temporada pasada y se situó en segunda posición como máximo asistente blanco, tras las 12 asistencias de Kroos. Eso sí, mejoró en el aspecto goleador con 11 tantos (diez en Liga) y dio 1.475 pases en total. 

Si consultamos sus números de las cuatro campañas con la camiseta blanca, el de Arroyo de la Miel suma 29 asistencias entre todas las competiciones. La mayoría, 22, en el torneo doméstico. En la campaña 2015-2016 logró su récord de pases de gol totales: diez (Liga, Champions y Copa del rey)

Lo que resulta anecdótico es que con asistencias y goles ha igualado también sus cifras de la primera temporada que vistió de blanco. Aunque tiene más mérito esta última porque ha disputado menos partidos, 41 comparados con los 53 de aquel año.