Juventus, de la mano de su entrenador Massimiliano Allegri, su capitán y arquero Gianluigi Buffon y sus fuertes y experimentados defensas, Giorgio Chiellini, Leonardo Bonucci y Andrea Barzagli, aparte de sus laterales, habían logrado algo significativo. Durante los 12 partidos que habían disputado en la Champions League antes del partido de la final, solo les habían marcado tres goles. Eran el equipo con menos goles recibidos y este no era un detalle que pasara por desapercibido.

El primero de esos goles fue marcado por el Olympique Lyonnais en fase de grupos, en un partido que finalizó empate 1-1. En el encuentro que le siguió, ante el Sevilla, recibieron su segundo tanto en contra, aunque los italianos ganaron sobre los españoles 1-3.

Pasaron casi seis meses hasta que hubiera otro equipo que pudiera marcarles. Fue en la semifinal contra el Mónaco, en el partido de vuelta donde los franceses intentaron remontar el marcador global y avanzar a la final. La revelación de la temporada, Kylian Mbappé anotó en el minuto 65, pero no fue suficiente ya que los de Turín ganaron 2-1 y el acumulado fue de 4-1 a favor de ellos.

Esto les dio paso a la final contra el Real Madrid el 3 de junio en Cardiff, Gales. Pero si la Juventus era el equipo con menos goles en contra, el conjunto “merengue” era el de mayor de tantos anotados a favor con 32 en total que contrastan con los 21 anotados por los italianos.

Ya en la final, la férrea y sólida defensa de la Juventus, que había podido defender exitosamente su arco a lo largo de la competición, tuvo que verlo ser vulnerado en cuatro ocasiones. Un doblete del goleador de la Champions, Cristiano Ronaldo, un disparo de media distancia de Casemiro que contó con algo de fuerte y rozó en Khedira y por último un gol ya en el minuto 90 de Marco Asensio que fue la estocada final.

En solo un partido les anotaron más goles que en toda la temporada en la Copa de Europa. Solo un equipo en 90 minutos hizo más daño que seis clubes en 12 partidos. Pero no fue un simple equipo, fue el Real Madrid, campeón de Europa por duodécima vez.