Cristiano siempre deja huella. Cada vez que pisa el terreno de juego suele ser el actor principal del acto. Y en el partido de ida de la Supercopa disputado en un estadio talismán para él, como es el Camp Nou, no fue menos. Aunque en esta ocasión ofreció una de cal y otra de arena.

Cristiano Ronaldo entró en el minuto 58 y fue el gran protagonista del partido. En menos de cinco minutos protagonizó dos acciones claves en el desarrollo del encuentro. Marcó un gol y muy poco tiempo después fue expulsado.

El portugués pugnaba un balón con el central del Barcelona Umtiti y cayó derribado en el área. A criterio del colegiado, Cristiano se dejó caer intentando simular una falta. Así que le mostró una tarjeta amarilla que resultó ser la segunda. La primera de esas tarjetas se la mostró tras marcar su gol por quitarse la camiseta en la celebración.

A priori, el luso se perderá la vuelta de la Supercopa de España que se disputará el miércoles en el Santiago Bernabéu. La sanción se puede ver agravada ya que el árbitro recogió en el acta un empujón de Cristiano en señal de protesta por la cartulina amarilla mostrada. El comité decidirá cuántos partidos de sanción merece el portugués si la sanción se lleva a cabo. Si el árbitro considera el empujón como una acción de agresión, aunque sea leve, el castigo a imponer oscilaría alrededor de los cuatro partidos de sanción.

Por otro lado, debido a lo dudosa y polémica que resultó la acción, es posible que el Real Madrid recurra la segunda tarjeta amarilla. Si así se produce, el comité se reunirá también para hacer efectivo o no dicho recurso. Todo ello deberá producirse antes del miércoles para hacer saber el resultado antes de que se juegue el partido de vuelta de la Supercopa de España.