Tras haber conquistado el primer título de seis posibles en esta temporada, el Real Madrid debía iniciar el camino para lograr levantar el segundo. Debían hacerlo en el partido de ida en el Camp Nou, ante un Barcelona titular, pero con la reciente baja de Neymar. Zidane dispuso un once inicial sin Cristiano Ronaldo, quien aún no está preparado físicamente para ser titular y sin Modric, quien arrastraba una sanción de hace varios años, en la última Supercopa que disputó el equipo merengue.

Inicio insípido, final picante

Isco, uno de los mejores de inicio a fin. Foto: Realmadrid.com
Isco, uno de los mejores de inicio a fin. Foto: Realmadrid.com

El partido fue de un relativo ida y vuelta, con una presión más alta por parte del Barcelona y algunas llegadas a los arcos rivales, pero sin muchas sorpresas. Isco comenzó a destacarse, como el mejor de su equipo y Ramos y Varane ayudaron a sostener el 0-0 durante el primer tiempo. Mateo Kovacic y Toni Kroos también hicieron un buen trabajo y las principales dudas surgían de la delantera formada por Benzema y Bale.

Pero en el segundo tiempo la historia cambió, los equipos comenzaron a poner algo más de intensidad, en especial el Madrid quien logró adelantarse en el marcador de manera inesperada, un despeje fallido de Piqué que finalizó en un gol en contra puso el 0-1. Messi igualó el partido tras un penalti en el minuto 77, por una supuesta falta de Keylor sobre Luis Suárez.

Zidane decidió desfundar una de sus armas más efectivas, Cristiano Ronaldo que estaba en el banquillo de suplentes ingresó en el segundo tiempo y eventualmente logró poner el 1-2 con un gol de contrataque de manual, logró despistar a Piqué y con fuerte e inalcanzable remate, para el arquero rival, le daba la victoria momentánea al Madrid. Pero solo dos minutos después el portugués fue expulsado por doble amarilla, acción del árbitro que despertó gran polémica.

Cristiano, autor de un auténtico golazo. Foto: Realmadrid.com
Cristiano, autor de un auténtico golazo. Foto: Realmadrid.com

Esto complicó el andar del Madrid en los siguientes minutos, pero no los detuvo seguir buscando un gol más y este llegó en el minuto 90, en una jugada casi calcada al gol de CR7. Contragolpe, pase de Lucas Vázquez a Marco Asensio, que desde la izquierda disparó para encajar el balón en el ángulo derecho del arco de Ter Stegen y puso el 1-3 final.

Situaciones complicadas, pero sensaciones positivas

De esa manera el Madrid ganó un complicado partido de ida, como visitante, con un jugador menos en el último tramo del encuentro y con un marcador más que favorable. Tras el final Zidane destacó el rendimiento de su equipo pero es consciente que deben jugar la vuelta “Estamos contentos con el resultado pero no está sentenciado y tenemos que jugar el miércoles. Hoy debemos disfrutar y mañana pensar ya en el partido de vuelta”.

El capitán también se sintió satisfecho con la victoria, pero tiene en la mira el partido del miércoles en el Bernabéu “Hemos dado un primer paso importante, pero no podemos sacar pecho. Es un buen resultado, pero queda el partido de vuelta y todo puede pasar”. Ya no se podrá contar con Cristiano Ronaldo para el segundo encuentro, pero está claro que se puede confiar en toda la plantilla en general, además Modric regresará después de cumplir con su sanción

El próximo miércoles 16 de agosto los dos equipos se volverán a ver las caras en el estadio Santiago Bernabéu para saber definitivamente quien se quedará con la Supercopa de España y si el Real Madrid podrá sumar su segundo título de la temporada que recién empieza.