La lluvia estuvo amenazando Madrid durante todo el desarrollo del martes. Sin embargo, nada iba a entorpecer la preciosa noche de Champions League que se iba a vivir en el estadio situado en la Avenida de Concha Espina. Como si de un coliseo romano se tratase, el Santiago Bernabéu recibió a 22 guerreros. Real Madrid y Tottenham estaban listos para la contienda. Era la hora de la verdad. Había llegado el momento de acabar con la igualdad que traían desde el inicio de la fase de grupo y dar un golpe en la mesa. El liderato parecía una golosa recompensa que no sería fácil de conseguir. De hecho, ninguno lo logró y ambos se tuvieron que conformar con el empate a uno que señaló el electrónico. 

Varane, en propia puerta, fue el encargado de adelantar a los visitantes y Cristiano, de penalti, firmó las tablas en un partido donde los guardametas tuvieron mucha culpa de que no se vieran más goles aquella noche. 

Emoción y goles

Comenzó el juego y los hombres de Zinedine Zidane fueron los primeros en hacer levantarse de sus asientos a los allí presentes. Cuando solo habían acontecido cuatro minutos desde el pitido que indicaba el inicio del partido, Cristiano y Benzema tuvieron una doble oportunidad para abrir la lata, pero, para su desgracia, el cuero no llegó a buen puerto.

Con el paso de los minutos, los dos combinados se mostraban muy activos sobre el verde y el equipo de Pochettino se acercaba tímidamente al arco de Keylor, mientras, el Real Madrid lo seguía intentando por obra de Cristiano Ronaldo, aunque, hasta el momento sin éxito.

Si los madrileños tiraban de su goleador, el combinado de Londres hacía lo propio con Harry Kane. Así, el, hasta el momento, máximo goleador de la Champions hizo al guardameta costarriqueño hacer una parada de mérito para evitar que los aficionados ingleses cantaran el primer gol. Tras esta gran jugada de los Spurs, saltó la polémica al césped, en una jugada en el área local entre Casemiro y Llorente. A pesar de las protestas del jugador riojano, el colegiado no señaló la pena máxima y el choque siguió su curso.

Llorente pidió penalti en una acción con Casemiro El Tottenham comenzaba a exprimir cada vez más sus virtudes. Se hacía con el dominio del balón merced del juego aéreo y no dudaba a la hora de armar la contra. Así, el equipo londinense se acercaba cada vez más a la portería blanca. Como el que avisa no es traidor, llegó el primer gol de los visitantes. Kane probó suerte rematando de tacón, pero es Varane el que, al intentar despejar, manda el balón a la red. Los aficionados visitantes allí presentes, estallaron en júbilo, mientras la grada madridista alentaba a los suyos. Ese aliento llegó a Isco, que intentó hacer magia para obrar el empate, pero su zurdazo fue detenido por el arquero francés.

Cristiano marcó el gol del empate. Foto: Dani Nieto (VAVEL)
Cristiano marcó el gol del empate. Foto: Dani Nieto (VAVEL)

Tras la diana con sello ‘Lilywhite’, los de Pochettino buscaron ahogar al Real Madrid, pero fueron los locales los que consiguieron encerrar al equipo visitante y obtener como recompensar el gol que supondría el empate a uno. Kroos fue derribado en el área y el árbitro impartió justicia señalando penalti. Cristiano fue el encargado de firmar las tablas cuatro minutos antes del tiempo de descanso. Tras regalar unos emocionantes 45 minutos, los protagonistas se marcharon por el túnel de vestuarios.  

Keylor, Lloris y un balón que no entró más

La segunda mitad arrancó con un Real Madrid que no se conformaba con firmar las tablas, por lo que Achraf probó suerte con una bonita internada. Poco después, Isco regalaría un gran centro que Benzema y Cristiano no supieron aprovechar. Como ocurrió en los primeros minutos del partido, era el combinado local el que más cerca estaba de adelantarse en el marcador.

La testa de Benzema fue la encargada de hacer que Lloris obrara un paradón. Poco después, el ‘7’ del Real Madrid lo intentó desde lejos, pero el balón se marchó al cielo del Bernabéu. Siguió el conjunto de Zidane su asedio, mientras el Tottenham solo creaba peligro con jugadas o bien a la contra o bien, de estrategia.

Cristiano fue un quebradero de cabeza para Lloris Lloris volvió a convertirse en salvador de su equipo con otra gran parada. Cristiano Ronaldo puso de nuevo a prueba al guardameta francés con un zapatazo al palo corto. La estrella madridista buscaba con ahínco el segundo tanto en su cuenta personal, por lo que no dudó a la hora de regalar a los allí presentes una jugada sensacional. El portugués llevó a cabo tres autopases para plantarse en la frontal del área, pero de nuevo el portero del Tottenham fue el encargado de desbaratar su jugada.

Keylor Navas fue crucial para los intereses locales | Foto: Dani Nieto (VAVEL).
Keylor Navas fue crucial para los intereses locales | Foto: Dani Nieto (VAVEL).

Los centenares de aficionados ingleses sabían que su equipo los necesitaba más que nunca, por lo que volvieron a alzar la voz en el Bernabéu. Los suyos respondieron con un magistral pase de Fernando Llorente que propició que Kane se plantara solo ante Keylor. En el hombre contra hombre, fue el portero blanco el que consiguió salvar a su club metiendo la mano cuando la grada visitante ya casi cantaba el gol. Zidane y Pochetino estaban contentos con lo que estaban viendo, por lo que no obraron los primeros cambios hasta cerca del minuto 80. El técnico francés dio paso a Asensio en lugar de Benzema, mientras que el argentino hizo lo propio con Rose, que sustituyó a Llorente.

El Real Madrid quería atravesar el muro infranqueable que parecía haber construido piedra por piedra Pochettino, por lo que Zidane siguió tirando de artillería y sacó al verde a Lucas Vázquez. A pesar de ello, finalmente hubo reparto de puntos, y Real Madrid y Tottenham se tuvieron que conformar con mantenerse igualados tanto a puntos como a goles en la Champions League.