Da comienzo la vuelta de La Liga Santander cuando el Real Madrid se encuentra más lejos del liderato que del descenso. Una situación que se ve agravada por un mar de dudas alrededor del técnico francés que actualmente dirige al plantel blanco, Zinedine Zidane. La realidad es la que es: el juego del Madrid escasea en verticalidad y los jugadores encuentran cada vez más difícil desarrollar un buen ataque.
No obstante, no hay mal que cien años dure. Este vacío de ideas tiene que verse solucionado pronto y este domingo, el club madridista tiene una oportunidad de oro para demostrar a todos los aficionados que el comienzo de una nueva era de buen juego y alegría merengue está cerca y que la crisis tiene los días contados. Los titulares volverán a la carga en el mejor sitio posible, en el Bernabéu, para hacer verdad todo esto.
¿Será el Deportivo de la Coruña el afectado?
Si se hace referencia a los antecedentes, es bastante posible que sí. El conjunto gallego lleva desde 2011 sin sacar un resultado positivo ante el Real Madrid. También en ese año fue la última vez que los blancos marcaron menos de dos goles en este choque, en el partido que se resolvió con empate a cero en Riazor. Además, hay que remontarse más atrás, a 2008, para ver una victoria blanquiazul.
Pero la actualidad madridista no permite ser muy optimistas. Contando con tan solo dos victorias en los cinco partidos disputados en lo que va de año, Zidane tiene la responsabilidad de dar fin a la crisis liguera que está rozando el ridículo: con un partido menos, está a ocho puntos del tercer clasificado, el Valencia, y con el Villarreal y el Sevilla pisándoles los talones, sin hablar, como se ha mencionado antes, de la lejanía del líder, el Barcelona, que se encuentra a 19 puntos de distancia, algo inadmisible para gran parte del club.
Por tanto, el Deportivo de la Coruña puede llegar a pagar los platos rotos si el Real Madrid muestra una reforma y un cambio de actitud para con su juego. Tanto el cuerpo técnico como los futbolistas llaman a la esperanza de salvar la temporada y animan a sus seguidores a apoyar incondicionalmente para que esto suceda. Es tiempo de darle la vuelta a la tortilla y la solución puede que pase por empezar sacando la ira contra los gallegos este domingo.