Jorge Valdés Aller, (León, 1981) dirigirá nuevamente al Real Oviedo a petición, como saben, del Comité Técnico de Árbitros (CTA) de la Real Federación Española de Fútbol. El colegiado leonés, recordemos, ya lo hizo el pasado 17 de diciembre en la Ciudad Deportiva de Nervión, en la que fuera la cuarta victoria consecutiva de los pupilos de Juan Antonio Anquela.

Esos tres puntos tan sufridos seguramente estarán presentes en la retina de todos los aficionados carbayones tanto por la expulsión de Yeboah como por el más que dudoso penalti detenido por el por entonces recientemente guardameta titular oviedista, el manchego, Alfonso Herrero. Un error arbitral que le pudo costar dos puntos al Real Oviedo.

A pesar de las tres tarjetas que mostró al conjunto carbayón en aquel encuentro, –dos amarillas y una roja- el colegiado leonés no se encuentra entre los árbitros más tarjeteros de la categoría de plata del fútbol español, siendo el tercero de los 22 del comité que menos amonestaciones y/o expulsiones mostró la pasada campaña.

Se trata, además, del colegiado más experimentado de la categoría, con nada más y nada menos que siete temporadas consecutivas impartiendo justicia por sus terrenos de juego. Además, en su currículum vitae podemos encontrar que de las tres expulsiones que mostró la pasada campaña, todas ellas cayeron del bando visitante, una más si sumamos la del ghanés Yeboah, aunque no por ello podemos decir que fuera menos clara.

Datos a parte, el partido que le espera al colegiado leonés el domingo es muy distinto del que arbitró el pasado diciembre en Nervión. En Oviedo, por el contrario, no se verá a ningún equipo tan necesitado realmente como lo estaba el filial hispalense, que demostraba en cada jugada de peligro que las ganas de que Valdés Aller señalase el punto de penal aumentaban proporcionalmente con el paso de los minutos.

Lo que más puede preocupar al Tartiere es la pérdida de tiempo de los visitantes en caso de que el conjunto local no se adelante pronto en el marcador. Eso es lo que acostumbran a hacer equipos de la zona media-baja de la tabla y que cuyo único objetivo no es otro que el de puntuar lejos de su estadio y hacerse fuertes en casa, escenario donde, por cierto, el Albacete perdió su último encuentro.

A pesar de ello, a Valdés Aller no le espera un partido fácil teniendo en cuenta que en el partido de la primera vuelta -que se saldó con victoria manchega por dos tantos a uno- se cometieron un total de 36 faltas, 21 cometidas por el equipo local y 15 por el Real Oviedo… ¡Y eso que sólo se trataba de la jornada 6!

Seguramente, el paso de las fechas y la fijación de los objetivos de cada uno de los equipos hará del partido del sábado un choque más bronco aún que el de aquella tarde de septiembre en Albacete y, por ello, desde VAVEL aprovechamos para desearle suerte y buena labor a quien, al fin y al cabo, tendrá la máxima autoridad sobre el césped del Tartiere: Jorge Valdés Aller.