Marcelino García Toral ha trasformado la mentalidad tanto de sus jugadores como de los aficionados valencianistas. El once tipo tiene muchos futbolistas que parecen otros y sin embargo son los mismos que jugaban la temporada pasada. El carácter otorgado por el ex entrenador del Villarreal y la confianza en su grupo han sido motivos clave para cambiar la dinámica.

Este Valencia juega habitualmente con un 4-4-2 clásico. El asturiano  siempre se ha caracterizado por manejar esta disposición táctica como variante principal en sus conjuntos. Defensa y centro del campo de cuatro con dos delanteros, donde suele mezclar un mediocentro con músculo (Kondogbia) y otro más creativo (Parejo), que se complementan a la perfección. Lo utilizó en Gijón, lo hizo en Huelva, en Santander, en Zaragoza, en Sevilla y también en su último equipo, el Villarreal. Lo considera equilibrado, donde todas las líneas están compensadas y cuyos movimientos tácticos son de fácil interpretación para sus futbolistas.

Es miticuloso con el orden sobre el césped, con tener las líneas juntas y realizar una presión en bloque. Las coberturas, las ayudas o la ocupación de espacios vacíos tienen que ser sistemáticos. Uno ve al Valencia y se da cuenta rápidamente que está bien trabajado. Hay coordinación y sintonía, lo cual se nota y lo cual le hace ser difícil de batir.

Jugadores a seguir

Seleccionar un futbolista normalmente no es justo. El fútbol es un juego de equipo y los unos sin los otros no son nadie. La llegada de Kondogbia, la aparición de Guedes o la consagración de Carlos Soler son argumentos suficientes para haber elegido a cualquiera de ellos. Sin embargo hay un jugador que cuando él juega bien, juega bien el equipo, y cuando no lo hace, su ausencia se nota en demasía. Es Daniel Parejo. 

El de Coslada ha tenido contínuos altibajos en su etapa valencianista y su equipo ha ido un poco en consonancia con el rendimiento del canterano madridista. Marcelino es conocedor de ello y con el fichaje del francés, ex del Sevilla, más la aportación de Carlos Soler, Marcelino buscaba que "el de Coslada" ganara soltura y sacara a pasear todo el fútbol que ya ha demostrado otras veces. Lo está consiguiendo y se está volviendo a ver al jugador que dirigió el timón "ché" cuando Nuno era entrenador y consiguieron acabar la Liga en puestos Champions.