A cuentagotas, dadas las capacidades económicas y deportivas del Real Valladolid, los fichajes para el proyecto de Paco Herrera van firmando por el equipo pucelano. El nuevo jugador que el técnico catalán tendrá en sus filas es Markel Extebarria, que tras renovar hasta 2018 con los vizcaínos, llega a préstamo por un año desde el Athletic Club, en cuyo filial disputó el curso pasado 30 partidos en la Liga Adelante, aunque el Bilbao Athletic finalmente perdió la categoría y regresó a Segunda B. 

Nacido en 1995, el jovencísimo zaguero servirá de competencia para Javi Moyano, uno de los pocos futbolistas que seguirán en Zorrilla tras la debacle de la ya terminada temporada. Su incorporación rubrica la óptima relación entre las oficinas vallisoletanas y bilbaínas, o más concretamente entre el Txingurri Valverde, entrenador de los leones, y Braulio Vázquez, director deportivo del Pucela, tras coincidir en su etapa como jugadores y en el Valencia.

Tras el caso del portero Kepa Arrizabalaga, que también fue cedido desde el filial de San Mamés, Etxebarria prolonga esta buena relación entre clubes. Para los que anhelen su puesta de largo como pucelano, el joven lateral derecho se encuentra de vacaciones en el extranjero y no será hasta dentro de unos días cuando sea presentado oficialmente en las filas de Herrera. Para entonces podría haber nuevas altas en el combinado albivioleta. 

Su llegada se suma a las del portero Isaac Becerra y el central Guitán, así como el carrilero zurdo Ángel, que firma con el primer equipo tras su buen hacer en el Promesas. De este modo, es el frente defensivo el que se está viendo reforzado en lo que va de mercado veraniego, si bien Paco Herrera y Braulio Vázquez trabajan duramente por ir incorporando nuevos nombres al vestuario del Real Valladolid, aún muy escaso de efectivos.